La empresa Arrigoni Ambiental, sinérgica del Grupo Arrigoni, ofrece al mercado un servicio de asesoría para una correcta gestión de sustancias peligrosas (SUSPEL) y residuos peligrosos (RESPEL), según lo exigido en los decretos supremos número 43 y 148 agregados en la Ley REP. La solución trata de bodegas modulares, construidas en acero, que pueden ser instaladas en un par de minutos en una faena, oficina, edificio o planta industrial, utilizándose incluso hasta más de diez años sin la necesidad de requerir mantenciones. “Un servicio que facilita la tarea al usuario, quien sólo debe preocuparse de la correcta operación y registro de los movimientos de los residuos y sustancias que entran y salen de las bodegas”, explica Gianfranco Arrigoni, gerente general de Arrigoni Ambiental. “El diseño de las bodegas cumple con la normativa vigente porque asegura las condiciones de almacenaje de las sustancias y la fijación de criterios mínimos que garantizan una contención segura y evitan que en algún minuto estos elementos representan un peligro para la seguridad laboral y medioambiental”, asegura el ejecutivo de la firma.
Algunos de los puntos exigidos en la normativa son: bandeja de contención con capacidad de retención mínima, ventilación natural, resistencia al fuego, señalética acorde al almacenamiento, extintor, kit de derrames, todas características que incluyen las bodegas de Arrigoni Ambiental, las que también presentarían ciertos elementos diferenciadores de otras bodegas del mercado, como orejas de izaje certificadas, guías para la grúa horquilla, patas ajustables en caso que el terreno donde se instale no sea horizontal y una estructura diseñada para otorgar una mayor resistencia al momento del uso. Más información en www.arrigoniambiental.cl