El complejo Coco cuenta con un diseño y comodidades de primer nivel pero en contacto directo con la naturaleza.
Fuente: Revista Construir
¿Se ha imaginado alguna vez dormir en “nidos” (cabañas), suspendidas en el aire? Ahora es posible en uno hotel que no solamente da esa experiencia, sino que prioriza el contacto con la naturaleza, la sostenibilidad y su diseño arquitectónico.
Con la idea de quitar las barreras entre interior y exterior, nace este hotel en forma de nidos que emergen de la jungla frente a la costa del Pacífico, para ofrecer un retiro insólito y en pleno contacto con la naturaleza, así lo describió el medio digital “Cerodosbe”.
Coco es un complejo de cinco cabañas de diseño, las cuales pertenecen al complejo Art Villas, que cuenta con Art Villa y El Atelier. El proyecto fue diseñado por el estudio de arquitectura Archwerk y sus interiores por Formafatal.
Su arquitectura es destacada por muros de hormigón desnudos y paredes de cristal retráctiles, cemento, maderas como la teca y el roble y una gran variedad de muebles contemporáneos que contrastan con la frondosidad del bosque tropical.
Las cinco estructuras individuales en forma de nido están interconectadas con pasarelas y terrazas abiertas, además cuentan con un tobogán que llega a una piscina infinita. Los nidos se completan con detalles de diseño en las cabeceras, los cuales están hechos de lámina de malla de alambre entrelazado con cable y cuerdas, y sus suelos son de madera.
Todos los nidos están flotando en un mismo suelo, el cual está diseñado para que todos se comuniquen con una estructura más grande que sirve de área común con cocina y comedor.
El complejo se encuentra construido a 300 metros del mar y garantiza un escapada del mundo real.