CDT Las partes de árboles con formas extrañas, como nudos y horquillas, generalmente se desechan o se convierten en mantillo, pero los investigadores del Instituto de Tecnología de Massachusetts están examinando cómo usar las propiedades únicas de estos desechos como componentes de construcción.
Fuente: Construction Dive
Las secciones en “Y” donde las ramas se unen al tronco se pueden usar en la construcción como miembros de carga y podrían ser lo suficientemente fuertes para soportar cargas críticas, según indican en el MIT. La profesora asociada Caitlin Mueller y su equipo están investigando cómo utilizar estas secciones de madera desechadas para reemplazar las piezas de construcción de acero u hormigón, que tienen un alto costo ambiental.
Los enfoques típicos para desechar madera, convertirla en mantillo de jardín o gránulos para quemar, liberan carbono a la atmósfera, según indican los experos. Además, la madera ofrecería una forma natural de secuestro de carbono, según la Institución de Ingenieros Estructurales . La investigación se produce en medio de la creciente demanda de estructuras y materiales de construcción bajos en carbono, ya que la industria de la construcción se preocupa cada vez más por el cambio climático.
Si bien los compradores de madera dan prioridad a una veta recta, que se presta mejor a la construcción, Mueller le dijo a Construction Dive que ha habido un interés reciente de la industria en las posibilidades de formas extrañas o no tradicionales.
“Tuve la sensación, y otros también la han tenido, de que existe esta increíble estructura de fibra interna que logra lo que es esencialmente una conexión de momento rígido en la rama de un árbol”, dijo Mueller. “Cada rama de árbol es un voladizo, a través de una alineación realmente compleja, entrelazada y tridimensionalmente curvada de fibras internas de madera. No tenemos la capacidad para hacer eso hoy con impresión 3D u otros procesos de fabricación hechos por el hombre”.
Mueller dijo que si bien esta investigación podría no llevar a los constructores a usar nudos de árboles en la construcción de inmediato, podría inspirarlos a encontrar usos alternativos para los materiales.
Residuos de madera
Para encontrar bifurcaciones de árboles para estudiar, Mueller recibió ayuda de la División de Silvicultura Urbana de la ciudad de Somerville, Massachusetts, que mantiene un inventario digital de más de 2,000 árboles en las calles, incluidos datos de ubicación, diámetro y condición, según el comunicado.
Cuando se taló una franja de ellos para dar paso a una nueva escuela, los trabajadores enviaron la madera de desecho al MIT, donde los investigadores recortaron, escanearon y documentaron las horquillas. Luego hicieron un escaneo 3D de las piezas y las representaron en la base de datos como tres barras rectas que se unen en un solo punto. Usando esta representación, los investigadores pudieron unir estas piezas de madera con los nodos que se usan en la arquitectura.
La industria del hormigón es responsable del 8% de las emisiones globales de dióxido de carbono, según un estudio de 2019 del MIT , y la industria siderúrgica es responsable de otro 7%, según la Agencia Internacional de Energía. A medida que empeora el cambio climático, los constructores y desarrolladores buscan cada vez más estrategias de construcción más ecológicas.
Lendlease, por ejemplo, está construyendo un rascacielos en Chicago con hormigón con bajo contenido de carbono , y los investigadores del Instituto Politécnico de Worcester están creando un hormigón que elimina el carbono de la atmósfera y lo absorbe. Las empresas de construcción como Webcor están impulsando objetivos ambiciosos de reducción de residuos .
“Creo que hay algo en esta idea que es realmente emocionante por la forma en que conecta el imperativo de la sustentabilidad con los nuevos vocabularios de diseño y las nuevas tecnologías digitales”, dijo Mueller. “Creo que hay algo en eso, que hace que esto sea algo especial en lo que trabajar”.
Cargando...
