CDT Como parte del diseño del Plan Maestro, se construirá en Albania un modelo de escuela abierta, una nueva tipología escolar replicable que transformará una infraestructura educativa en un espacio público abierto a la comunidad.
Fuente: Plataforma Arquitectura
Como parte del diseño del nuevo Plan Maestro Tirana 2030, Stefano Boeri Architetti ha creado una nueva tipología escolar replicable, que se construirá en la capital albanesa durante los próximos diez años, transformando una infraestructura educativa en un espacio público abierto a la comunidad a todas las horas del día y todos los días del año. El prototipo de escuela comunitaria recién inaugurado en Tirana servirá como un “nuevo epicentro para la vida en los barrios urbanos”, utilizado por los estudiantes durante el día como campus escolar y por toda la comunidad los fines de semana y días festivos como lugares de recreación y reunión, así como potenciales albergues en caso de emergencias y desastres ambientales.
El plan maestro se diseñó entre 2015 y 2017 y prevé la construcción de 17 nuevas escuelas a gran escala. La propuesta no solo pretendía ser una respuesta al considerable crecimiento demográfico de Albania durante los últimos veinte años, sino un medio para revivir los suburbios de Tirana y ofrecer un nuevo concepto de escuelas públicas que también utilizan las comunidades locales. Este crecimiento urbano ha saturado y fragmentado el tejido urbano, sin equilibrio entre los espacios construidos y abiertos, y la mínima consideración de los servicios de los residentes.
El nuevo Plan Regulador de Tirana, que cubre toda el área metropolitana, opera en tres niveles: sostenibilidad y forestación urbana, que tiene como objetivo crear una nueva red de espacios verdes alrededor de la ciudad; redistribución de la infraestructura pública en áreas de vecindario más pequeñas; y remodelación y densificación de áreas urbanas perimetrales escasamente ocupadas.
Stefano Boeri señala que “si antes parecía poco más que una espléndida utopía, hoy, después de esta dramática pandemia, el tema de las escuelas abiertas se ha convertido en una necesidad real para responder a la demanda de bienestar expresada por los habitantes de todo el mundo. A nivel educativo, una escuela abierta significa ósmosis con el territorio, un intercambio de conocimientos y experiencias con un impacto importante en la vida del barrio. Este nuevo proyecto de escuelas abiertas podrá dar a Tirana un adelanto de esa idea de una ‘ciudad archipiélago’, una metrópoli formada por barrios autosuficientes en la prestación de servicios a sus habitantes, algo que hoy persiguen muchas otras ciudades”.
Las escuelas estarán ubicadas en la región noroeste de la capital, en las áreas de Don Bosko, Kodër-Kamëz y Piazza Shqiponja. El campus de Don Bosko incluirá una escuela primaria y secundaria, espacios educativos y una guardería, un complejo que ocupará una superficie de casi 10.000 metros cuadrados. La escuela de Kodër-Kamëz, a su vez, brindará una gama de servicios educativos diferentes similares a los que ofrece la Escuela Don Bosko, además, la superficie total será de casi 12.000 metros cuadrados, mientras que la escuela de Shqiponja, un poco más pequeña, tendrá casi 8 mil cuadrados.
Además, las nuevas escuelas cuentan con una serie de espacios permeables en la planta baja, haciéndolos activos y acogedores para los peatones, conectando plazas, calles y parques. En general, las entradas principales se diseñaron para garantizar la máxima flexibilidad y facilidad de circulación. Las instalaciones y funciones específicas, como cafeterías, bibliotecas e instalaciones deportivas, serán utilizadas en diferentes momentos del día tanto por los estudiantes como por la comunidad local. Aunque abierto y permeable, el modelo de escuela fue concebido para garantizar la seguridad y protección de los estudiantes a través de su estructura arquitectónica acoplada al interior de un bloque residencial urbano donde se ubican todas las funciones.
En términos de diseño visual, los edificios cuentan con fachadas de gres rojo que contrastan con una base blanca, formando una combinación de materiales y colores que rinden homenaje a la arquitectura tradicional italiana de las primeras décadas del siglo pasado, que también se ve ampliamente en Tirana. La torre actúa como un hito, enfatizando la estructura como arquitectura pública. En cuanto al diseño de interiores, se prestó mucha atención al color, ya que es muy influyente en la comprensión, la comodidad y la interacción social de los usuarios.
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