Se trata de cuatro productos nuevos que aportan un cambio fundamental en la industria de la construcción. Enterate de más en la siguiente nota.
Fuente: MDZ
El hormigón es responsable de más del 7% de las emisiones globales de dióxido de carbono y un ingrediente clave del mismo es el cemento Portland, que se fabrica calentando – a temperaturas muy altas – piedra caliza y arcilla. Con el objetivo de mejorar el medio, en la industria de la construcción, se están explorando formas innovadoras para fabricar estos dos elementos. A continuación, te contamos cuatro alternativas novedosas y sostenibles que ya se están aplicando.
1. Biocemento elaborado a partir de bacterias. Presentado en la exhibición de 2023 del Museo Contemporáneo de Copenhague Reset Materials, fabricado por Biomason (EEUU) y la firma GNX (Dinamarca), este producto consiste en utilizar bacterias no modificadas, para cultivar un material similar al cemento, que resulta un 20% más liviano que los bloques de concreto, y a la vez, tres veces más resistente. Con este novedoso material, los colaboradores crearon una columna arquitectónica cultivada a partir de bacterias, con una mínima intervención humana, en solo 72 horas. El proceso requiere menos energía que la fabricación de cemento y también, para lograrlo, se pueden utilizar agregados naturales (arena, tierra) u hormigón, ladrillo y vidrio reciclados.
2. Cemento libre de carbono. En lugar de producir cemento con piedra caliza, este procedimiento utiliza roca de silicato de calcio libre de carbono para fabricar un producto que no libera dióxido de carbono. Este material fue desarrollado por la firma Brimstone y es el primer producto que recibe la certificación de terceros, de la organización internacional de normalización ASTM International, lo que demuestra que cumple con las mismas pautas de especificación que el cemento tradicional.
3. Cemento reciclado impreso en 3D. El uso de esta tecnología para hacer bloques de hormigón impresos en 3D ensamblados, sin refuerzo de acero, permite que el material final tenga un 40% menos de CO2 incorporado, lo que reduce su huella de carbono en un 25%, en comparación con las estructuras de hormigón armado. El uso de la impresión 3D también permite una mayor precisión, tal como lo demuestra un puente construido con este novedoso material, que ha permitido el ahorro de hasta un tercio del hormigón y la mitad del acero, en comparación con un puente convencional. Esta innovación llega de la mano de la empresa suiza de materiales de construcción Holcim, con socios como el Grupo de Investigación de Bloques (BRG) del Instituto de Tecnología en Arquitectura de ETH Zürich, Zaha Hadid Architects Computation y Design Group (ZHA CODE).
4. Bio-Block. Son bloques de hormigón fabricado a base de algas. El Bio-Block amortigua mejor el sonido comparado con los bloques comunes de este material y es más liviano.