Fuente: Ekos Negocios

 

El primer semestre de 2025 ha consolidado varias tendencias que están redefiniendo la industria de la construcción, desde la arquitectura hasta la ingeniería, impulsadas por el cambio mundial hacia la sostenibilidad, la innovación tecnológica y la eficiencia operativa. Para constructoras y arquitectos, comprender estas dinámicas es clave para mantenerse competitivos y responder a las demandas crecientes de clientes y regulaciones ambientales.

01. Sostenibilidad y eficiencia: el nuevo eje central

La sostenibilidad se ha convertido en un imperativo ineludible. Los proyectos actuales priorizan el uso de materiales reciclados y naturales como maderas certificadas, piedras locales y revestimientos que mejoran el aislamiento térmico y acústico. Además, la incorporación de energías renovables o climatización eficiente son prácticas ya estandarizadas en edificios de alta gama. Este enfoque integral reduce la huella de carbono y responde a la creciente regulación global sobre emisiones y eficiencia energética.

02. Construcción 4.0: digitalización y robótica se afianzan en el sector

La digitalización está transformando radicalmente la planificación, diseño y ejecución de proyectos. El Building Information Modeling (BIM) continúa evolucionando, ahora potenciado con inteligencia artificial y análisis de Big Data para optimizar recursos, prever mantenimientos y ajustar el diseño a las condiciones reales de uso y clima. La domótica continúa ganando terreno en las construcciones de vivienda, con mayores aplicaciones en electrodomésticos, iluminación y espacios. Estas tecnologías no solo reducen costos y tiempos, sino que mejoran la seguridad y calidad final.

03. Modularidad: menos tiempo e impacto, con la misma calidad

La arquitectura modular y prefabricada gana terreno como solución para acelerar la construcción y garantizar calidad. Fabricar componentes en entornos controlados permite un mejor control de calidad, reducción de desperdicios y menor impacto ambiental. Esta metodología es especialmente útil en proyectos residenciales y comerciales, donde los módulos se ensamblan rápidamente en obra, disminuyendo la exposición a riesgos climáticos y laborales.

04. El diseño: más flexible, más resiliente

Los espacios interiores se diseñan con mayor flexibilidad para adaptarse a cambios en el uso y necesidades del usuario, incorporando soluciones que permiten reconfigurar ambientes sin grandes obras. A nivel urbano, la resiliencia frente a eventos climáticos extremos es una prioridad, con infraestructuras que integran diseño biofílico, sistemas de drenaje sostenible, techos verdes y materiales resistentes que prolongan la vida útil de las construcciones e incrementan el bienestar de los usuarios.

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