La implementación de la metodología de trabajo BIM, de las siglas en inglés Building Information Modelling, ha supuesto toda una revolución en el mundo de la construcción.
Fuente: Inarquia
La eficiencia de los procesos, la reducción de residuos, la gran sostenibilidad que se alcanza en el proceso, el aumento en la seguridad durante la construcción… Estos son sólo algunos de los beneficios de aplicar el BIM en un proyecto, que toma parte en todas sus fases: desde los primeros bocetos hasta el derribo del edificio.
BIM es una metodología de trabajo colaborativa a tiempo real para la gestión de proyectos de construcción. Gracias a los software de modelado de edificios en 3D, BIM logra centralizar toda la información del proyecto. Hablamos de informes, estudios, planos, y todo tipo de documentación que se emplea en el proceso.
BIM integra todos los agentes que participan en el desarrollo de la obra, desde arquitectos, ingenieros, constructores, incluso a los futuros propietarios. Esto mejora la comunicación entre todas estas partes. A continuación, vamos a repasar algunas de las principales ventajas de realizar un proyecto constructivo mediante metodología BIM, así como algunos problemas que se plantean. Además, veremos dónde podemos encontrar el software BIM ideal.
Ventajas de la metodología BIM
Colaboración óptima entre equipos
El trabajo colaborativo entre las distintas partes se gestiona digitalmente en este entorno común. Los datos se intercambian de manera precisa, ahorrando malentendidos y discrepancias. Además, es posible trabajar en remoto, una práctica muy extendida tras la pandemia de Covid-19, apareciendo nuevos roles como el coordinador BIM o BIM manager.
Este rol es el encargado de gestionar los modelos digitales y detectar con antelación posibles problemas. El flujo de trabajo se realiza mediante una conexión a una red local o en la nube, permitiendo trabajar desde cualquier lugar.
Mejora de la eficiencia
El modelo digital del edificio se crea mediante un software paramétrico en que sus diferentes elementos están relacionados y sus características se analizan. Cualquier modificación que se realice en el modelo se actualiza en tiempo real para todos.
De esta manera, se tiene un mayor control sobre los elementos, y se genera información técnica muy valiosa como mediciones mientras se va modelando. Gracias a esta integración y control sobre el proyecto, los plazos de diseño y planificación se reducen considerablemente.
Detección de errores
El trabajo colaborativo en tiempo real sobre un modelo virtual permite disponer de una infraestructura detallada con el nivel de desarrollo necesario en cada fase específica.
Los softwares BIM permiten detectar interferencias entre diferentes vínculos al integrar el modelo digital de arquitectura con el de estructura, como por ejemplo al situar una ventana sobre un pilar.
Con medios tradicionales, lo habitual es dar con estos problemas durante las obras, al no disponer de un análisis tan exhaustivo de los datos. Corregir estos fallos sobre la marcha supone una pérdida extra de dinero y tiempo. Por el contrario, mediante BIM podemos detectar estos problemas con antelación y anticipar las soluciones necesarias.
Optimización de recursos
Las herramientas de control y coordinación de la metodología BIM permiten desarrollar los proyectos con mucha mayor precisión en cuanto a mediciones, y realizar una cuantificación de recursos necesarios de forma más ajustada.
El modelo virtual completo del edificio hace posible optimizar los recorridos de los sistemas, como tuberías, conductos, o cableado. Estas cuestiones quedan resueltas en menos tiempo, disponiendo así de más tiempo para otras tareas.
Sostenibilidad
Mediante BIM podemos realizar análisis energéticos gracias a la gran cantidad de datos que podemos extraer del modelo. Podemos estudiar los materiales, el aislamiento o la orientación del edificio, para maximizar la eficiencia energética antes de construir.
Además, la digitalización de los documentos que se generan a lo largo del desarrollo del proyecto y la posibilidad de trabajar y reunirse en remoto reducen la necesidad de gastar papel y el número de viajes, cuidando así el medio ambiente.
Inconvenientes de la metodología BIM
Si bien la metodología BIM ha llegado para quedarse, hay una serie de puntos a tener en cuenta a la hora de implementar esta tecnología.
Inversión necesaria
Las empresas deben hacer una gran inversión económica para implementar este sistema en su trabajo. El cambio del modelo tradicional al sistema BIM requiere una estrategia de implementación que se traduce en gastos de formación, nuevas licencias de software, y un período de transición para adaptarse.
No solo hay que plantear los gastos como los equipos y la tecnología requerida, sino además una serie de gastos menos tangibles pero igualmente importantes. Hablamos de que todos los elementos de las operaciones de la empresa deben integrarse en el sistema.
Formación
La metodología BIM es totalmente diferente a los sistemas de diseño por ordenador convencionales, por lo que es necesario aprender a utilizar esta nueva tecnología. Las empresas tienen que desarrollar programas de formación para los empleados, lo que en ocasiones es incompatible con el presupuesto, los horarios y la carga de trabajo ya existentes.
Resistencia al cambio
La mayoría de empleados están acostumbrados a trabajar con herramientas tradicionales que dominan, por lo que cambiar a la última tecnología puede presentar una serie de barreras. Inversión de tiempo para aprender a usarla, miedo al fracaso, abandonar la zona de confort… implementar una tecnología completamente diferente en la empresa hace necesario tomar una serie de decisiones estratégicas por parte de la dirección de la empresa.