Al menos 30 puentes se vieron afectados por las lluvias y 20 tienen daños estructurales

Los tiempos y la inversión que se necesitarán para arreglarlos son inciertos, debido a que en otros aún no se sabe el nivel de daños que sufrieron.

Fuente: El Mercurio

En Chile existen más de 7.000 puentes bajo la tuición del Mininisterio de Obras Públicas (MOP). En varias ocasiones se han visto afectados de manera importante, como en el terremoto de 2010, cuando fueron 211 los afectados.

En esta ocasión el MOP informó a “El Mercurio” que han sido al menos 30 puentes los que se vieron afectados de alguna forma por el evento climático de la semana pasada: 20 sufrieron daños estructurales y están cortados –ya sea porque sufrieron de colapso total o porque perdieron terraplenes de acceso–, siete tienen el tránsito restringido o cortado por precaución ante un eventual aumento del caudal, y en tres el tránsito está suspendido, pero presentan una alternativa mediante un baipás.

Del total, el MOP cataloga cinco como los más cruciales. El puente San Alfonso en el Cajón del Maipo, que está cerrado para vehículos debido a daños en su estructura; el puente Lircay en el kilómetro 249 de la Ruta 5 Sur, cuyo terraplén de acceso presenta socavación; el puente el Parrón, en la ruta N-901-Q en la comuna de Yungay, cuya estructura está comprometida; el puente Zapallar, en la ruta N-655 en la comuna de San Ignacio, donde la energía del caudal ha deteriorado las fundaciones del puente; y el puente El Durazno, en la ruta N-888 en la comuna de Quillón, donde la crecida de aguas provocó socavación, erosionando el material de relleno estructural de uno de los estribos.

De ellos depende también, por ejemplo, que el servicio ferroviario vuelva a la normalidad. De todas formas, el ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz, dice que “en menos de una semana hemos podido retomar servicios permitiendo que el 99% de nuestros usuarios cuente ya con los servicios en los que acostumbran viajar. Lo que queda es levantar la operación del puente Lircay y tener mayor exactitud respecto del estado del puente Longaví a través de peritajes técnicos.
En ambos casos resta determinar tiempos y costos de reposición con precisión”.

Montos pendientes

Esas fueron algunas de las consecuencias que dejó en la zona centro sur del país el sistema frontal de la semana pasada, que además tenía el martes más de 40 caminos cortados. Pero de todas formas, el estado de la infraestructura vial va cambiando todos los días, debido que en algunos sectores está comenzando a disminuir el cauce de los ríos. Por ello, explican en el MOP, aún no hay plazos concretos ni montos de inversión para arreglar los daños: “Una vez que baje el nivel del cauce se realizará una evaluación de la estructura por parte de especialistas. En función de la evaluación estructural, se definirán las medidas a implementar”, dijeron.

De todas formas, aseguran del MOP que “existe una política de monitoreo permanente de las estructuras de los puentes y, en ese sentido, se prioriza todas aquellas que podrían tener una mayor afectación”.

Aun así, la académica de ingeniería en la UC, Alondra Chamorro, dice que “se tienen que revisar los diseños de puentes considerando los eventos actuales y las proyecciones. Se debería revisar la metodología de diseño de puentes considerando las proyecciones hidrológicas producidas por escenarios asociados al cambio climático (… ).

Dado el patrón de precipitaciones nuevo que se está generando producto del cambio climático, ese es uno de los principales puntos que hay que abordar, pero para eso se necesita inversión, inversión en conocimiento y en reforzar la infraestructura existente y en construir puentes más robustos”.

Y es que la también investigadora del Consejo de Políticas de Infraestructura (CPI) dice que “el diseño de puentes se realiza con datos históricos de precipitaciones, y esos escenarios son los que se están quedando cortos. Entonces, lo que se tiene que hacer es mejorar la metodología de diseño, que incorpore escenarios futuros que no necesariamente estén descritos en los datos históricos registrados”.

Similar opina Jorge Gironás, del Cedeus: “Nosotros tenemos cierta forma para diseñar cosas, para diseñar un puente. Si ahora estamos midiendo lo que pasa, podemos aprender y mejorar nuestros diseños, tomando en cuenta variables que antes no tomábamos en cuenta. Muchos diseños en ingeniería hidráulica no toman muy en cuenta la temperatura o la toman de una manera simplificada. Pero a lo mejor ya no puede ser tan simplificada”.