Aguas Antofagasta inició la ampliación de su Planta Desaladora Norte (PDN), en el sector La Chimba, que comenzará a operar en el primer semestre de 2024.
Fuente: Portal Minero
Antofagasta será la primera gran ciudad de América abastecida 100% con agua desalinizada, luego que la empresa sanitaria de la región, Aguas Antofagasta Grupo EPM, pusiera en marcha la ampliación de la Planta Desaladora Norte (PDN), ubicada en el sector La Chimba.
El proyecto representa la mayor inversión histórica en la industria sanitaria regional, con un costo estimado de US$130 millones, y permitirá que las nuevas instalaciones empiecen a operar en el primer semestre de 2024.
La ampliación aumentará en 53% la producción de la planta desalinizadora, con lo que se podrá abastecer la demanda actual y futura de la capital regional y de Mejillones. Esto, sumado a la cobertura actual de la demanda de Tocopilla, permitirá que las tres mayores comunas costeras de la región cubran el 100% de sus requerimientos con agua potable desalada hacia el primer semestre de 2024.
El ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, destacó que «es un sueño de la región que se está cumpliendo. Se trata no solo de una inversión importante y concreta que va en línea con la reactivación económica y la generación de empleo, sino que también es una señal de una ciudad y una región que está apostando por la innovación en el algo tan fundamental como el agua para consumo humano».
«La ampliación de la Planta Desalinizadora Norte nos dará una seguridad hídrica que es muy necesaria para el sector productivo y agrícola de la región, y algo que es fundamental, que es abordar el agua para consumo derivado de la crisis habitacional que vive esta región», agregó.
El gerente general de Aguas Antofagasta Grupo EPM, Carlos Méndez Gallo, resaltó que «estamos trabajando incansablemente para que las consecuencias del cambio climático y la sequía que afecta a gran parte del país no sean una preocupación, aplicando tecnologías que nos permitan seguir abasteciendo agua potable de forma sostenible en medio del desierto más árido del mundo».
Hito regional y mirada de futuro
El Vicepresidente Ejecutivo de la Asociación Chilena de Desalinización (Acades), Rafael Palacios, enfatizó que esta ampliación de la PDN «representa un hito relevante porque Antofagasta pasa a ser la primera ciudad grande, con más de 100 mil habitantes, de toda América abastecida en 100% con agua desalinizada».
En entrevista con Portal Minero, Rafael Palacios agregó que la iniciativa representa un ejemplo de adaptación al cambio climático por parte de una ciudad inmersa en el desierto más seco del mundo, lo que permite mirar con optimismo el futuro.
«Creo que augura un futuro bastante resiliente. Primero se usó esta tecnología para la minería, ahora la tenemos en una ciudad grande y no cabe duda que el próximo paso es la agricultura. De hecho en Antofagasta hay una cooperativa de agricultoras que producen hortalizas todo el año en invernadero con agua potable de la planta desaladora», expresó.
«Este es el camino a seguir. Estamos frente a una crisis hídrica tan brutal y acelerada que requiere de un portafolio de soluciones. Pero claramente la desalinización es una alternativa que permite enfrentar un problema puntual, específico, urgente, de muy buena forma con una tecnología sustentable y probada para distintas localidades, desde el desierto más seco del mundo hasta otras ciudades grandes o localidades pequeñas», añadió.
Beneficios del proyecto
Las obras de ampliación de la PDN permitirán a la empresa sanitaria acompañar el crecimiento poblacional y desarrollo productivo de la capital, ampliando significativamente la cobertura de servicios sanitarios en el territorio.
La ceremonia de la primera piedra marca un punto de partida para nuevas construcciones de viviendas públicas y privadas, equipamiento urbano y actividades económicas, además de generar nuevos espacios públicos y áreas verdes, ampliando las oportunidades de crecimiento regional.
El proyecto incorpora 7.300 m2 de áreas verdes en el interior del recinto, incluyendo una plaza abierta a la comunidad.
Además, una vez que entre en operación la ampliación de la PDN, el consumo eléctrico de la planta contará con una certificación ambiental internacional, es decir, energía limpia que reemplazará a los combustibles fósiles, evitando la emisión de 79.300 toneladas de CO2 al año, en el marco del compromiso de la sanitaria por a la disminución de la huella de carbono en su proceso de producción.