CDT Jason Ballard, CEO y cofundador de ICON, habla sobre el comienzo de la empresa, los desafíos que afronta la vivienda en todo el mundo y fuera de la Tierra, su tecnología de impresión 3D en constante evolución y el proceso, entre otros temas.
Fuente: Plataforma Arquitectura
Fundada a fines del 2017 y nombrada una de las “empresas más innovadoras del mundo” en 2020, ICON es una empresa de construcción que superó los límites de la tecnología, desarrollando herramientas para hacer avanzar a la humanidad incluyendo la robótica, el software y los materiales de construcción. Relativamente joven, la empresa emergente con sede en Texas ha estado entregando casas impresas en 3D en EE. UU. y México, tratando de abordar los desafíos globales de la vivienda mientras desarrolla sistemas constructivos para respaldar la futura exploración de la Luna, con socios como BIG y la NASA.
Jason Ballard, CEO y cofundador de ICON, quien fue presentado en Times’ Next 100 como uno de los 100 líderes emergentes que están dando forma al futuro, dio esta entrevista sobre diversos temas relacionados a la arquitectura y el diseño.
Christele Harrouk: Originalmente eres biólogo conservacionista. ¿Cómo hiciste el cambio de la naturaleza a la construcción y más específicamente a la tecnología de la construcción?
Jason Ballard: Resulta que si te preocupas por la conservación ecológica, el entorno construido es inevitable. Los edificios y la industria de la construcción encabezan la lista cuando se trata de energía, agua y uso de recursos, producción de desechos y casi cualquier otra métrica ambiental que rastreamos. Mi interés y educación previa en biología de la conservación me impulsó a iniciar una empresa de tiendas de mejoras para el hogar que fueran ecológicamente innovadoras. Después de trabajar en miles de hogares, pensé: “Seguramente hay una mejor manera de construir hogares que es más asequible, menos derrochadora y más eficiente energéticamente que los métodos de construcción convencionales”.
Eso inició un proyecto de estudio e investigación de meses que buscaba formas prefabricadas de hormigón aislado, estructuras avanzadas, albañilería robótica, hongos arquitectónicos y más. Finalmente, aterricé en la impresión 3D como la tecnología más prometedora para crear una verdadera revolución que abarcara todas las casillas que me importaban. Me volví a conectar con mi amigo y cofundador de TreeHouse, Evan Loomis, y comencé a trabajar los fines de semana en la construcción de un prototipo en un almacén en Austin. Nos asociamos con Alex Le Roux, quien también estaba trabajando en un proyecto similar en Houston. En 2017, los tres cofundamos ICON para volver a imaginar la industria de la construcción de viviendas y ayudar a resolver algunos de los desafíos globales más apremiantes de una vivienda adecuada.
CH: ¿Cómo te impulsaron a este campo? ¿Encuentras similitudes entre las dos profesiones?
JB: Tengo una inclinación natural a pensar en los problemas al más alto nivel… no solo de manera limitada, así que eventualmente comencé no solo a preguntarme cómo podemos mejorar las casas convencionales, sino que también comencé a rechazar la premisa de que la estructura fija o el ladrillo y el mortero eran la única manera de hacer las cosas. Resulta que no se ha introducido ninguna verdadera innovación para resolver nuestro problema global de vivienda, así como para mitigar el impacto ecológico que la industria de la construcción tiene en nuestra sociedad. La construcción de viviendas no ha experimentado cambios significativos desde la Edad Media. Es hora de un cambio de paradigma. Mi experiencia en biología de la conservación ha sido solo una de las muchas contribuciones para trabajar en resolver una mejor manera de construir casas a escala y con un menor impacto ambiental. Además, impulsa mi interés en la exploración extraterrestre. La misma tecnología que nos permitirá abordar los desafíos de la vivienda en la Tierra, nos permitirá aventurarnos en un mundo nuevo.
CH: ¿Cuál fue el disparador inicial y el impulso detrás de esta nueva forma de crear una casa?
JB: Sabía que quería construir desde el trabajo de imaginar formas más sostenibles en la construcción de viviendas y porque millones de personas en todo el mundo carecen de la necesidad básica de una vivienda y eso es simplemente inaceptable. En 2014, como parte de un proyecto de investigación, decidí aprender todo lo que había que saber sobre las impresoras 3D que hay actualmente en el mercado. Lo que encontré es que lo que se puede hacer con impresoras a pequeña escala es bastante limitado. Supuse que al hacer impresoras más grandes, nuevas e interesantes, podrían aparecer nuevas oportunidades.
Eso nos envió a una misión de varios años para construir nuestra propia impresora y desarrollar la base para el sistema de construcción Vulcan 3D que finalmente revelamos durante SXSW 2018 en Austin, TX, y mostramos la primera casa impresa en 3D permitida en los EE. UU. A partir de ese momento, ICON pudo continuar innovando la tecnología para que podamos imaginar un mundo capaz de imprimir en 3D varias casas en simultáneo y donde cada una sea única. Estos avances tienen como objetivo crear mejoras dramáticas en la velocidad, la calidad, la resiliencia y la sostenibilidad de la construcción de viviendas.
CH: ¿Qué nos puedes contar sobre su marco temporal? ¿Cuánto tiempo se tarda en imprimir una sola casa?
JB: Las casas de entre 37 y 46 metros cuadrados que ICON ha impreso en 3D hasta la fecha utilizando el sistema de construcción Vulcan, tomaron un tiempo de impresión de alrededor de 24 horas por casa, repartidas en varios días. Hemos impreso tres casas a la vez simultáneamente en Austin, TX y dos en México, lo que aumenta aún más la velocidad a la que podemos entregar las mismas. El equipo imprimió el primer desarrollo de viviendas convencionales con casas impresas en 3D para el desarrollador 3Strands que van desde aproximadamente 93 a 186 metros cuadrados y donde cada hogar tomó entre 5 y 7 días de impresión.
CH: La tecnología de la construcción cambió el juego y todas las rígidas reglas de la profesión. Dicho esto, ¿cómo percibes el futuro de la arquitectura y el campo de la construcción? ¿En la tierra y en el espacio?
JB: El sector de la construcción con impresión 3D parece estar listo para un crecimiento acelerado. Los códigos de construcción se están poniendo al día, la tecnología continúa madurando muy rápidamente y existe una demanda cada vez mayor de una nueva forma de ofrecer hogares más resistentes y dignos a toda velocidad. La industria del diseño se ha revolucionado con la adopción del diseño asistido por computadora y la gestión de la información de construcción. Independientemente de cuán digital se haya vuelto la documentación, los diseños aún se construyen prácticamente de la misma manera que siempre. La fabricación robótica nos permitirá eliminar la pérdida en la traducción de datos a la materia y fabricar casas a gran velocidad, con menos desperdicio y con mayor precisión que en la actualidad. ¡El futuro parece brillante!
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