CDT La construcción industrializada, un fenómeno que ha revolucionado la forma en que concebimos los proyectos constructivos, emerge como un cambio de paradigma en la industria, ofreciendo soluciones eficientes, sostenibles y económicamente viables.
Fuente: EkosNegocios
La construcción industrializada implica preparar el proyecto previamente en ambientes controlados por medio de una integración temprana de distintos especialistas y proveedores. Así, al llegar a trabajar en la obra, todo se hace de una manera más eficaz y eficiente, permitiendo un mejor uso de los recursos y generando menor cantidad de residuos y contaminación.
América Latina se posiciona como un terreno fértil para la implementación de esta innovadora metodología, buscando mejorar la eficacia de sus procesos constructivos y abordar desafíos ambientales.
Sostenibilidad en la construcción industrializada: ¿optimización o transformación?
Nos encontramos inmersos en un cambio de paradigma en el sector de la construcción. El enfoque tradicional, basado en la construcción in situ con largos tiempos de fabricación, ejecución y entrega, ha dado paso a un conjunto de técnicas innovadoras que reducen la huella ecológica del proceso, aumentan la eficiencia y reducen los tiempos de ejecución.
La construcción industrializada está en el centro de esta transformación, especialmente ante las exigencias cada vez más estrictas de los gobiernos y las entidades supranacionales en materia medioambiental y de sostenibilidad. A todo ello se le une un panorama que refleja una escasez de mano de obra y una demanda cada vez mayor de soluciones ágiles y de calidad, a la que la construcción industrializada puede responder de manera más que óptima.
En consecuencia, gracias a un sistema de construcción industrializada, los procesos están mucho más automatizados. Esto permite reducir los tiempos de ejecución, disminuir la siniestralidad, mejorar la sostenibilidad del proyecto y, por supuesto, reducir los costes del proyecto. Un sistema mucho más eficiente, tanto para las empresas como para los usuarios, que redunda en una mayor satisfacción, la reducción de los costes y la optimización de los recursos.
BIM en la construcción industrializada: ¿para qué sirve?
La metodología BIM (del inglés, Building Information Modeling) es una metodología de trabajo colaborativo que, a través de una serie de herramientas y procesos, permite que todas las personas participantes en la construcción de un edificio puedan coordinarse en su diseño, construcción y mantenimiento.
Para todos los profesionales que participan en un proyecto de construcción, como ingenieros, arquitectos, aparejadores, diseñadores o instaladores, BIM proporciona un modelo virtual y compartido de datos en el que puede verse, de manera detallada, el diseño del proyecto de la obra.
Es decir, es una base de datos fiable que sirve para tomar decisiones importantes durante la fase de oferta, ejecución y mantenimiento del edificio. Así, se reducen los conflictos en los proyectos de construcción, se mejora la productividad, se reducen los tiempos y, en definitiva, se logra una mayor coordinación entre todos los profesionales implicados.
Con la metodología BIM se puede, por ejemplo, simular el proceso de diseño, producción y construcción, registrar todas las variables que intervienen en el proceso constructivo y configurar todos los elementos necesarios para acelerar y optimizar la construcción.
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