Con el objeto de proteger a los consumidores de las prácticas comerciales engañosas y ayudarles a elegir mejor sus compras, el Parlamento Europeo ha dado luz verde a la Directiva sobre el Empoderamiento de los Consumidores para la Transición Ecológica. La nueva ley mejorará el etiquetado de los productos y prohibirá el uso de alegaciones medioambientales engañosas.
Fuente: Construible
El pasado mes de septiembre, el Parlamento Europeo y el Consejo alcanzaron un acuerdo provisional con respecto a la Directiva sobre el Empoderamiento de los Consumidores para la Transición Ecológica. La norma tiene por objeto proteger a los consumidores de las prácticas comerciales engañosas. Para lograrlo, se añadirán a la lista de prácticas comerciales prohibidas de la Unión Europea una serie de hábitos comerciales problemáticos relacionados con el blanqueo ecológico y la obsolescencia temprana de los productos.
La nueva Directiva debe recibir ahora la aprobación final del Consejo, tras lo cual se publicará en el Diario Oficial y los Estados miembros dispondrán de 24 meses para incorporarla a su ordenamiento jurídico nacional.
Etiquetado claro y fiable de los productos
La Directiva pretende que el etiquetado de los productos sea más claro y fiable mediante la prohibición del uso de alegaciones medioambientales genéricas como ‘respetuoso con el medio ambiente’, ‘natural’, ‘biodegradable’, ‘climáticamente neutro’ o ‘eco’ sin prueba alguna.
A partir de ahora también se regulará el uso de etiquetas de sostenibilidad, dada la confusión provocada por su proliferación y por no utilizar referencias comparables. En el futuro, la Unión Europea solo permitirá etiquetas de sostenibilidad basadas en sistemas de certificación oficiales o establecidas por las autoridades públicas.
Asimismo, la Directiva prohibirá alegaciones de que un producto tiene un impacto neutro, reducido o positivo en el medio ambiente gracias a los sistemas de compensación de emisiones.
Garantía de durabilidad
Otro objetivo importante de esta nueva legislación es hacer que productores y consumidores se centren más en la durabilidad de los bienes. En el futuro, la información sobre la garantía deberá ser más visible y se creará una nueva etiqueta armonizada para dar más visibilidad a los productos con un período de garantía ampliado.
Las nuevas normas también prohibirán las alegaciones infundadas sobre la durabilidad, las incitaciones a sustituir los consumibles antes de lo estrictamente necesario y presentar los productos como reparables cuando no lo son.