El pueblo argentino que evita los apagones generando energía con cáscaras de maní

En el corazón de Ticino, Córdoba, se erige Generación Ticino Biomasa (GTB), una moderna central de generación eléctrica. Su esencia: la cáscara de maní o cacahuete y ocasionalmente el chip de madera. Con una capacidad robusta de 4,63 MW, esta joya tecnológica aspira a tener una autogestión efectiva de 4 MW.

Fuente: EcoInventos

Iniciada en 2017 y terminada al año siguiente, GTB no solo representa un triunfo técnico. Desde octubre de 2018, se convirtió en un símbolo de progreso, al ser una de las pioneras en generación de energía renovable en la nación.

El Poder del Maní

¿Quién diría que un subproducto como la cáscara de maní tendría tanto potencial? Esta biomasa, resultado del trabajo de Lorenzati, Ruestch y Cía, es el alma de la central. Y, aunque en contadas ocasiones se recurre al chip de madera, el maní sigue siendo el protagonista.

Compromiso Verde

Generación Ticino Biomasa S.A no solo busca generar electricidad. Su misión va más allá: ser guardianes del ambiente. Cumpliendo con estándares nacionales e internacionales, como la norma ISO 14001:2015, la empresa promueve prácticas sustentables. Es una llamada a la comunidad, a sus trabajadores y a la sociedad en su conjunto, para valorar y proteger nuestro mundo.

Tecnología

La maquinaria detrás de GTB:

• Mecanismos especializados para recibir y alimentar el combustible.
• Una caldera Acuotubular HLA-22x45x400 de alto rendimiento.
• Sistemas para ajustar aire, agua y emisiones.
• Una avanzada turbina de vapor y su condensador.
• Equipos de enfriamiento y generación eléctrica.

Todo, meticulosamente diseñado para garantizar una producción energética óptima.

El Proceso RANKINE: La magia de la biomasa

Similar al ciclo termodinámico tradicional, RANKINE transforma biomasa en energía. Mediante la quema de cáscara de cacahuete, el calor liberado convierte el agua en vapor de alta presión. Este vapor impulsa una turbina que, a su vez, activa un generador eléctrico.

Luego, el vapor de menor presión es condensado y el calor sobrante es liberado. El agua resultante es recirculada, preparándola para una nueva ronda de generación energética.

Ticino, con la ayuda de GTB, está trazando el camino hacia un futuro más verde, aprovechando al máximo los recursos naturales de la región y demostrando que la sustentabilidad y la tecnología pueden ir de la mano.