El nuevo trazado de la Línea 9 del Metro integró a La Pintana, Bajos de Mena y La Legua en su recorrido de 27 km y 19 estaciones a lo largo de Av. Santa Rosa, y que conectará ocho comunas de la capital: Recoleta, Santiago, San Miguel, San Joaquín, La Granja, San Ramón, La Pintana y Puente Alto. Según los expertos, su impacto en la calidad de vida de miles de personas se sentirá también en el precio de las viviendas y en una proliferación del comercio de los sectores beneficiados.
Fuente: EMB Construcción
La consultora Colliers estima un aumento de hasta 85% en el valor de las viviendas, en un plazo de 3 a 5 años desde que entre en operación el nuevo servicio. “La evidencia empírica indica que la valoración de la vivienda, una vez que el Metro esté en servicio, iguala en pocos años los valores de viviendas equivalentes en comunas muy desarrolladas como La Florida o San Miguel, por ejemplo. Esto significa que de un valor aproximado de 35 UF/m2 la valoración podría llegar a 65 UF/m2, lo que equivale a un alza estimada de 85% en un plazo de 3 a 5 años”, señala Reinaldo Gleisner, Vicepresidente de Colliers.
Para la consultora, el impacto favorable del Metro va a estar determinado en gran medida por la orientación de la gestión municipal. “En la RM, el desarrollo de viviendas está centrado en un 80% en departamentos de 1 y 2 dormitorios, que es lo que requiere actualmente gran parte de la población. Sin embargo, en la mayoría de los Municipios se están limitando severamente estos desarrollos inmobiliarios, quitando opciones a las personas y familias que requieren viviendas”.
Gleisner explica que es fundamental que las municipalidades estructuren planes reguladores que permitan la construcción de viviendas en altura con buena densidad y armónicas en su integración espacial. “Una regulación inteligente y con énfasis en integración y calidad urbana de uso de suelo, densidad y altura, va a generar fuerte demanda por vivienda, y luego por comercio, educación, entretenimiento y todo tipo de servicios, potenciando cada sector y valorizando sus inmuebles”.
Colliers estima que el mayor impacto positivo será en las comunas más alejadas, hasta ahora aisladas, donde sus habitantes requieren extensos periodos de tiempo para poder desplazarse hasta sus lugares de trabajo o estudio.
“La conectividad e integración que brinda el Metro tiene un enorme impacto en la vida de los ciudadanos. Se abren nuevas oportunidades de mejorar la calidad de vida de las personas. El efecto puede ser que un hijo tenga opción de llegar a una educación de más calidad y que lo saque de los complejos medios en poblaciones de mayor marginalidad, por ejemplo. El impacto económico puede demorar muchos años, como es la trayectoria de personas en un proceso de superación de condiciones de marginalidad. En síntesis, una mejor conectividad abre más opciones de estudio, laborales y de incorporarse a nuevos entornos sociales”, detalla el estudio.