Este recurso es esencial en la construcción sostenible gracias a sus beneficios ambientales y estructurales inigualables. Nota escrita por Yocelyn Videla, docente de la Escuela de Construcción de Duoc UC, sede Maipú. 

Fuente: La Cuarta Constructor

La construcción sostenible implica potenciar la sostenibilidad de los edificios y reducir el impacto ambiental, tanto con la elección de sus materiales, como en su proceso constructivo. 

Es por esto que la madera es un ejemplo ideal para las construcciones del presente y futuro, siendo un material sostenible y responsable con el medioambiente. Esto debido a que es un insumo que puede reciclarse, además de provenir de bosques sostenibles diseñados para dar recursos al rubro de la construcción, de tal manera que se garantice la conservación de los bosques y la biodiversidad, se protejan los derechos de las comunidades locales y se cumplan las normas legales. Esto busca garantizar que las necesidades del presente se satisfagan sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades.

La madera es uno de los recursos naturales más utilizados desde la antigüedad, tal como  en la construcción de elementos de defensa y ataque, como escudos, lanzas, y flechas, construcción de puentes, barcos, casas y templos.

Con el pasar de los años, el rubro de la madera ha avanzado con tecnologías que le han permitido abrirse paso en la construcción de edificios de gran envergadura, con alturas de hasta 24 pisos.

Alguno de los beneficios de construir en madera son:

– Mayor eficiencia energética. Esto debido a su buena conducción del calor, convirtiéndose en uno de los mejores aislantes, siendo mejor que el ladrillo y el hormigón armado.

– Absorción de carbono (CO2). Acumula gran cantidad  de CO2. 

– Emisión de gases de efecto invernadero.  En su industrialización genera un menor porcentaje de gases en comparación con la fabricación de otros materiales utilizados en el rubro de la construcción.

– Producción de desechos. El uso de madera genera un bajo porcentaje de desechos, debido a que es el único material de construcción que es renovable y reciclable.

– Características físicas. La madera tiene gran flexibilidad y bajo peso por lo que la hace un material ideal para resistir sismos.

– Resistencia al fuego. Cuando realizamos construcciones con piezas de gran tamaño o volumen, pueden resistir a las llamas del fuego ayudando a tardar más en derrumbarse qué estructuras hechas de acero.

– Optimización en tiempos de trabajo. Al ser un material seco y manejable aumenta la velocidad de construcción en los proyectos.

En la actualidad, este material sigue siendo muy utilizado en países tales como Japón y Estados Unidos, donde su porcentaje de incidencia en la construcción de viviendas nuevas, reparaciones y ampliaciones supera un 70%. Aún así, en Chile se sigue asociando a la construcción en madera como un proyecto de baja calidad.

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