En busca de nuevas tecnologías para la construcción que optimicen los acabados y la aislación de edificios, que minimicen costos y ofrezcan mayores ventajas, hay un material que puede decirle adiós al yeso a corto plazo. Se ha estudiado que este recurso es más flexible, económico, resistente y repelente de la humedad por lo que puede ser el nuevo aislante de construcción.
Fuente: Ecoticias
La industria de la construcción, una de las más contaminantes del planeta, pone primera y avanza cinco casilleros con la utilización de este nuevo aislante de construcción que promete sustituir al yeso por sus evidentes desventajas de manipulación, fragilidad, y permeabilidad al agua.
En este sentido, se ha encontrado que el poliestireno expandido (EPS, por sus siglas en inglés) puede ofrecer mejores beneficios que el yeso. El nuevo aislante ofrece una vida útil más prolongada, es flexible, versátil, rígido y no se agrieta como el anterior.
El EPS, también conocido como telgopor, es un material que ya se venía utilizando en la construcción en paredes y techos, así como para envase de electrodomésticos, la industria farmacéutica y artículos frágiles con la función de amortiguar bien el peso y los golpes.
¿Qué es el telgopor?
El EPS es un material perteneciente a la familia de los termoplásticos, por lo que comparte propiedades con el metacrilato y el poliestireno y se fabrica a través de perlas de este último material.
Para obtener poliestireno expandido se introduce en moldes cerrados herméticamente y se lo expone a fuerte presión de vapor de agua, entre 1 y 5 bares. Con este procedimiento, el telgopor resultante se expande dentro del molde adoptando su forma y tomando rigidez.
El resultado final es un bloque de telgopor blanco, rígido y a medida de un material constituido por un 98% de agua y solo 2% de material sólido. Las propiedades que adquiere en el uso para la construcción lo convierte en el nuevo aislante dentro de la construcción.
Beneficios del poliestireno expandido como nuevo aislante
El potencial del telgopor para reemplazar al yeso es abrumador. Entre algunas de las ventajas que ofrece podemos mencionar su alta resistencia térmica. Debido a su baja conductividad, puede mantener las temperaturas tanto cálidas como frías de un ambiente.
Este beneficio lo convierte en el nuevo aislante de construcción, porque ofrece mayor eficiencia energética, ya que reduce el consumo en aires acondicionados y artefactos de calor, y por lo tanto de uso de energía eléctrica.
A pesar de estar fabricado casi completamente por agua, el material resultante ofrece menos porosidad que el yeso y no atrae la humedad, repeliendo hongos y bacterias y evitando las filtraciones.
Su peso es mucho más ligero, por lo que puede aplicarse en techos y utilizarse en grandes edificios sin que esto suponga mayor adaptación de estructuras de contención. Adicionalmente, es flexible y maleable, fácil de transportar y su versatilidad le permite ser fabricado de la forma deseada.
De todos modos, el nuevo aislante se puede adquirir en planchas, cortar a medida y lijar. De fácil colocación, supone un ahorro de tiempo y de costos para la obra.
Algunas consideraciones a tener en cuenta del telgopor
El nuevo aislante tiene muchas propiedades que pueden reemplazar al yeso, pero siempre que se tenga en cuenta su baja densidad y su propiedad inflamable. En este contexto, deben utilizarse medidas de precaución antes de decidir el lugar apropiado donde instalarlo.
No es recomendable las instalaciones de luminarias y bombillas en techos con telgopor, por lo que puedes utilizar en este caso cableado externo. Su aislación térmica es menor a la del yeso por su porosidad, aunque son muy buenas sus propiedades acústicas.
Por todo esto te recomendamos que razones bien el plan de obra antes de elegir una opción de aislación más sostenible. Si proyectas de forma adecuada la colocación de este nuevo aislante de construcción, los beneficios serán más que eficientes para tu obra.