En el mundo de la decoración y el diseño de interiores, o cuando queremos cambiar el mood de nuestro hogar aunque no seamos profesionales, la iluminación juega un papel crucial en la creación de ambientes que no sólo sean estéticamente agradables, sino también funcionales.
Fuente: Comunicado de Prensa
Una buena iluminación puede transformar para bien toda una habitación, mejorando el estado de ánimo o aumentando la productividad por ejemplo. En el contexto del Día Internacional de la Luz (16 de mayo), declarado por la UNESCO para reflexionar sobre cómo la luz y sus tecnologías afectan la vida cotidiana; a continuación Tecnolite, marca mexicana líder en iluminación para enriquecer los momentos de las personas, nos da algunos tips y conceptos clave para aprender a iluminar nuestros espacios de manera efectiva y a la vez eficiente.
Entender el papel del color
El color de las paredes de una habitación influye significativamente en cómo se percibe la luz. Tonos claros y brillantes, como los blancos, cremas y pastel, reflejan más luz, lo que ayuda a crear una sensación de amplitud y luminosidad. Por el contrario, los colores oscuros absorben luz, lo que puede hacer que una habitación se sienta más pequeña y cerrada de lo que en verdad es.
“Si tu espacio se encuentra en un ambiente caluroso, los mejores colores a utilizar son los fríos, como azules, morados y rosas. Y si estás en un clima frío o húmedo, los colores ad-hoc entonces son los amarillos, cafés, naranjas y rojos. Esto, desde el punto de vista del clima en relación con los colores de una habitación“; comenta Héctor Olivera, Director de Marketing y Transformación Digital de Grupo Construlita, al que pertenece la marca Tecnolite.
Maximizar la luz natural
La luz natural es beneficiosa para la salud y realza la belleza de los espacios. Al planificar la iluminación de una habitación, es importante considerar la ubicación y el tamaño de ventanas u otras fuentes de luz natural. Instalar tipos de ventanas que nos permitan ajustar la cantidad de luz natural que entra en el espacio, puede ayudar a controlar el ambiente a lo largo del día.
“En este sentido, yo sugiero elegir colores que complementen la cantidad de luz natural disponible y el tipo de iluminación artificial que se utilizará. La prioridad de fuente a usar siempre debe ser la luz natural, viendo a la artificial como un apoyo básico obviamente al oscurecer pero que podemos evitar durante el resto del día, según nuestras actividades”; agrega Héctor Olivera.
Elegir la iluminación adecuada
El experto señala que una habitación bien iluminada, a menudo requiere combinar distintos tipos de iluminación:
- Iluminación general: Proporciona el nivel de luz básico en una habitación. Las soluciones de iluminación modernas, como las bombillas y lámparas LED atenuables por controles de pared o a través de una app desde dispositivos móviles, son una gran opción pues permiten ajustar la intensidad y el color de la luz según las necesidades del momento.
- Iluminación de tarea: Conocida como luz fría, se trata de los tonos blancos que facilitan actividades como leer, trabajar o cocinar de manera cómoda. Las lámparas de escritorio o las luces bajo los gabinetes, son ejemplos de esta variedad de iluminación para realizar actividades productivas sin forzar la vista.
- Iluminación ambiental: Para darle más personalidad al espacio, se puede añadir un toque estético y crear atmósferas a través de una amplia gama de soluciones tecnológicas innovadoras, como cintas de LED para muebles, luces de acento en las esquinas o lámparas tipo plafón LED conectadas a WiFi, que incluso pueden controlarse con la voz.
Integrar smart lighting
Justamente la recomendación previa es un claro ejemplo de cómo el uso de dispositivos inteligentes en la iluminación ofrecen una flexibilidad sin precedentes hoy en día. Los sistemas de smart lighting, que entran dentro de la mega-tendencia del internet de las cosas (IoT, por sus siglas en inglés), permiten controlar las luces desde un smartphone o mediante asistentes de voz, ajustar tonos y temperaturas de color, o programar escenarios para diferentes momentos del día; entre muchas otras opciones.
“Esto no sólo mejora la comodidad de los espacios, sino que también ayuda a optimizar el consumo de energía, ya que tales productos están fabricados a base de tecnología LED, que ahorra hasta un 90% de consumo eléctrico dependiendo con qué otros equipos más tradicionales se comparen estos dispositivos de última generación“; añade el especialista.
Jugar con la direccionalidad de la luz
La dirección de la luz también afecta la percepción del espacio. Las luces dirigidas hacia el techo pueden hacer que una habitación parezca grande y abierta, mientras que las que apuntan hacia abajo suelen crear ambientes más íntimos y acogedores.
Considerar el propósito de cada espacio
Y aunque ya se había comentado un poco en los puntos anteriores, es importante tener en cuenta que la función de una habitación debe guiar las decisiones de iluminación. Por ejemplo, una sala de estar puede requerir una iluminación más cálida para crear un ambiente relajante, mientras que un estudio podría beneficiarse de una luz más brillante y blanca para mantener la concentración.
¿Qué es eso de “temperaturas de color”?
Por último, Héctor Olivera profundiza sobre el concepto “temperaturas de color“, que se refiere a la característica de la luz visible y describe cómo luce el color de la luz ante la vista humana, midiéndose en unidades Kelvin (K).
“Respecto a la relación de las temperaturas de color con los tonos de cualquier habitación, las que más resaltan con los colores rojos, naranjas, cafés o amarillos son las que brinda una luz cálida, preferentemente de 3000 K; ya que muestra los colores tal cual son, sin ocultar nada por así decirlo. Y para tonos rosas, azules o verdes, las temperaturas de luz que mejor combinan y convienen son las de la luz fría, de alrededor de 6500 K“; explica.
Un par de aplicaciones del concepto de temperatura del color en espacios concretos, son:
- Hoteles de playa. Donde la iluminación tiende a ser del tipo fría, para dar la sensación de frescura al interior después de un día caluroso en el exterior.
- Casas de montaña. Donde los climas son más fríos y al entrar a espacios como una cabaña, la luz cálida ayuda a descansar y brinda la sensación de confort después de estar durante horas fuera con temperaturas bajas.
“Elegir los colores ideales para una habitación pasa por analizar su relación con la iluminación. Más allá del amor a primera vista de un tono en particular, debemos considerar factores como las actividades que se realizarán en cierto lugar o su propósito, el ambiente y sobre todo el cómo queremos sentirnos en ese espacio“; concluye el Director de Marketing y Transformación Digital de Grupo Construlita.