En Obras de Construcción: Encofrados y Andamios aumentan la productividad con procesos más eficientes

Hoy, a estos elementos se les considera clave, ya que brindan un servicio eficiente, mejorando los procesos constructivo y reduciendo plazos y costos, lo que deriva en una mayor productividad. 

Fuente: El Mercurio

El apogeo de la construcción en altura y de obras civiles a gran escala que ha experimentado nuestro país en los últimos 20 años, así como también la necesidad de aumentar la productividad con procesos más eficientes, ha generado una oferta de encofrados y andamios bastante amplia y diversa, con empresas especializadas en cada producto y que ofrecen soluciones innovadoras, de alta calidad y para los diversos elementos requeridos.

“El mercado de los encofrados o moldajes y andamios en Chile ha tenido un auge bastante significativo debido al servicio que prestan a las obras en construcción. Lo que se ve reflejado en reducción de costos y plazos al utilizar este tipo de herramientas necesarias en la industria. Sin duda, hoy es un mercado altamente especializado y tecnificado, ofreciendo soluciones innovadoras y tecnológicas para su uso eficiente”, explica Joao Ávalos, docente de la carrera Construcción de Inacap.

Para Hernán Ravest, docente también de la carrera Construcción de Inacap, este mercado es además competitivo. “Cada marca ha incorporado materiales, tecnología e innovación en la elaboración de sus productos y sistemas, para lograr satisfacer las necesidades de proyectos exigentes y de distinta naturaleza como obras hidráulicas, civiles, industriales, edificaciones y restauraciones”. Un aspecto importante es que los encofrados y andamios influyen de forma positiva en la productividad de las obras de construcción.

Y es que con estos elementos se pueden obtener productos terminados con recursos más eficientes que hace años cuando se fabricaban en obra –implicando mano de obra, materiales, riesgo de accidentes, plazos largos, etc. –. Además permiten responder a las necesidades específicas de cada elemento (muro, pilar, losa).

“Son muy importantes -agrega Ravest- ya que se involucran directamente en el proceso de producción de elementos estructurales y puntualmente en el caso de los encofrados, en las faenas de construcción de elementos de hormigón armado.

Hay que considerar que el retraso en esta actividad puede afectar la planificación del proyecto y la correcta elección y disponibilidad de estos elementos podría llegar a ser clave en la obra”. Uno de los requisitos más relevantes que deben tener los encofrados y andamios es la seguridad durante su uso, además que sean sencillos de instalar, mediante procesos breves y con el menor número de elementos adicionales.

Los andamios, por ejemplo, deben ser estables y resistentes para permitir que los trabajadores se desenvuelvan de forma segura en la zona a la cual están accediendo. “Las exigencias actuales apuntan a preferir andamios con mayor capacidad de carga y adaptables para maximizar la producción”, indica.

Enfatiza también que los encofrados no deben absorber agua de amasado del hormigón, además deben ser estancos y capaces de soportar la presión que ejerce el hormigón contra sus paredes, considerando que el tiempo durante el cual actúa esta solicitación es variable y que depende de distintos factores.

Ávalos destaca que en Chile no existen normas que regulen la utilización de encofrados en obra, pero hay instituciones, como la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), que ha elaborado un manual para su utilización. “De hecho, este documento, disponible en la web, menciona que quienes importan este tipo de sistemas se basan en las normas del país de origen”.

Por su parte, precisa que las normas que regulan el uso de andamios son la NCH997. of1900 que habla de andamios, sus terminologías y clasificación; la NCH998. of1999 sobre los requisitos de seguridad de su uso; la NCH2501/1. of2000 que resuelve los requerimientos generales que deben cumplir y, por último, la NCH2501/2. of2000 que menciona las exigencias estructurales para estos elementos.

Tendencia

La industria de la construcción está experimentando cambios significativos a nivel mundial y los encofrados y andamios son parte relevante de esta evolución, proponiendo sistemas innovadores y de alta calidad. Al respecto, Joao Ávalos sostiene que los sistemas de construcción de encofrados deslizantes y andamios suspendidos son tendencias en construcción en 2023.

“Los encofrados deslizantes son sistemas utilizados en la construcción de edificios altos que permiten que la estructura del edificio se desplace hacia arriba mientras se construye, lo que posibilita una construcción más rápida y eficiente, ya que se puede trabajar en varios pisos simultáneamente”, detalla. Y añade: “Los andamios suspendidos se usan para trabajos de fachada y mantenimiento en edificios altos. Estos sistemas permiten a los trabajadores realizar su labor en zonas inaccesibles mediante plataformas móviles suspendidas. En ambos casos, estos sistemas ofrecen una mayor seguridad y eficiencia en la construcción de edificios de altura”.

Al respecto, Hernán Ravest comenta que en el caso particular de los andamios, a nivel mundial la tendencia es potenciar la multifuncionalidad de sus productos. “Bajo el mismo concepto se realizan investigaciones para ofrecer materiales cada vez más resistentes y de menor peso, con el propósito de facilitar su logística, armado y utilización”.

En materia de encofrados, afirma que la tendencia es entregar al cliente soluciones integrales, las cuales comprenden desde el diseño, planificación, optimización, acompañamiento y control de cada proyecto. “En este marco, la incorporación de tecnología BIM permite vincular los modelos en 3D del proyecto con aspectos tan importantes como la planificación y el seguimiento de modificaciones, permitiendo evaluar sus efectos en el costo, plazo y calidad”.

Innovaciones

Para los docentes de Inacap, los encofrados y andamios han presentando grandes avances o innovaciones, en relación a las materialidades, los usos y la tecnología de los mismos, que permiten disponer de productos y sistemas eficientes. “Esto debido al auge y demanda de los servicios de estos elementos, los que fueron perfeccionándose de la mano de los requerimientos de los clientes, las empresas constructoras”, asegura Joao Ávalos.

Dado lo anterior, estos productos pueden ser específicos para cada proyecto según sus necesidades geométricas y estructurales. “La utilización de aplicaciones y software también constituye un aporte en esta materia, permitiendo al mercado ofrecer un exhaustivo diseño previo y entregar asesoría durante el proceso de construcción de estructuras complejas”, concluye Hernán Ravest.