CDT Monumentales, de alturas imposibles y diseñados por un elenco de genios de la arquitectura, estos edificios simbolizan la voluntad de Oriente Medio de dejar su huella en el mundo.
Fuente: Revista AD
Respaldados por la ambición de crear una nueva imagen de la región, los edificios de Oriente Medio, —financiados en muchos casos por fondos soberanos—, han logrado lo imposible en los últimos 15 años: subir el listón de la innovación arquitectónica y estructural en todo el mundo.
El viaje no ha estado exento de críticas, los puristas del diseño consideran la zona una especie de Disneylandia de los arquitectos y también se ha llegado a afirmar que se “compra” la reputación del diseño. Sea como sea, visionarios de todo el mundo han contado con la infraestructura, (y la financiación), para imaginar los iconos del futuro.
Museo Nacional de Qatar, Doha (Qatar): 396 millones de euros
Inspirado en la rosa del desierto, uno de los fenómenos naturales más fascinantes de Oriente Medio, este museo de 40.000 m2 construidos diseñado por Jean Nouvel alberga 11 galerías permanentes. Situado frente a la cornisa de Doha, la estructura entrelazada del museo se funde con el histórico distrito ribereño, integrándose en él y revitalizándolo.
Louvre de Abu Dabi, Abu Dabi, EAU: 594 millones de euros (más extras)
Poner precio a la primera sede de este emblemático museo fuera de Francia no es tan sencillo como podría pensarse. Diseñado por Jean Nouvel, el complejo, de más de 24.000 metros cuadrados cubiertos por un tejado teselado costó unos 594 millones de euros. Abu Dabi pagó otros 475 millones para poder utilizar el nombre de “Louvre” durante 30 años, a lo que hay que añadir una cuota de 682 millones a cambio de préstamos de obras de arte, exposiciones especiales y asesoramiento.
Gran Museo Egipcio, El Cairo (Egipto): mil millones de euros
Nacido de un concurso convocado en 2003 al que concurrieron algunas de las mayores empresas de diseño, el complejo fue ideado por el estudio irlandés Heneghan Peng Architects. La construcción comenzó en 2005, pero contratiempos sin precedentes —la crisis financiera de 2008, la Primavera Árabe de 2011 y la pandemia— hicieron que el proyecto se retrasara considerablemente. Aunque se rumorea que podría inaugurarse oficialmente a finales de primavera de 2024, a día de hoy no se ha anunciado fecha de apertura del recinto en su totalidad.
Kingdom Centre Tower, Riad (Arabia Saudí): 1.100 millones de euros
Reconocida al instante en todo el mundo gracias a su singular corona, la Kingdom Centre Tower de Riad fue diseñada por el equipo del estudio de arquitectura estadounidense Ellerbe Becket y Omrania, una empresa de diseño saudí. El perfil del edificio le confiere una suavidad que complementa su cortina de reflejos plateados. El remate en la parte superior es una pasarela acristalada que alberga una plataforma de observación pública. En su interior, encontramos residencias exclusivas, un centro comercial de lujo y un hotel Four Seasons. Ha sido protagonista de muchos acontecimientos culturales en la región, como el festival de iluminación Noor Riyadh, cuando en 2021 el artista belga Koert Vermeulen suspendió su instalación, Star in Motion, en el vacío elíptico.
Burj Khalifa, Dubai, EAU: 1.370 millones de euros
Como un faro elegante y esbelto, el Burj Khalifa se eleva 828 metros sobre el nivel del mar. Es la joya de la corona del lujoso centro urbano del emirato, se inauguró en 2010 y desde entonces ostenta el récord de edificio más alto del mundo. Diseñado por un equipo dirigido por Adrian Smith, de Skidmore, Owings & Merrill, su inusual perfil de múltiples capas procede de la flor Hymenocallis o lirio araña, una flor regional del desierto. Su interior alberga apartamentos de lujo, miradores y servicios de lujo superior.
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