Es un material noble, ligero, flexible y resistente. Se puede trabajar con madera aserrada o madera tecnificada.
Fuente: El Economista
Para muchas empresas y profesionales la madera se ha convertido en la piedra angular de la sostenibilidad en la edificación. Es uno de los materiales más modernos del mundo y su uso en la construcción no es algo nuevo. Desde los orígenes de la historia de la humanidad se ha empleado en las edificaciones. Es un material noble, ligero, flexible y resistente, que el sector inmobiliario lo vuelve a poner en valor.
“El sector se encuentra actualmente en una transición hacia la industrialización en los edificios, de un modo que la construcción tradicional e industrializada coexistan en un futuro. Las nuevas tendencias y tecnologías han ayudado sobremanera a la tecnificación de diferentes materiales que podríamos considerar tradicionales”, explica Elena Espuela, técnico de industrialización de Vía Ágora.
“A esto le acompañan los principales problemas que experimenta el sector, centralizados en el encarecimiento de los materiales y la falta de mano de obra especializada; junto a las exigencias actuales y futuras que vendrán por parte de cliente y normativa en materia de sostenibilidad. Todo ello, hace que la madera vuelva a cobrar protagonismo como uno de los materiales de presente y futuro dentro del sector”, añade la experta.
La madera como material estructural, ¿es mejor hibridado con otros materiales como acero u hormigón? Es importante conocer las propiedades de cada material o materiales a utilizar a nivel estructural y comportamiento frente a las exigencias de la normativa.
Parece un camino claro el hecho de recurrir a la hibridación de materiales y sistemas ya que en situaciones donde un material es el idóneo bajo un determinado sistema puede tener deficiencias en comportamiento térmico o peso, por ejemplo, y mediante el uso de materiales complementarios se puede disponer de una solución óptima.
Se puede trabajar con madera aserrada o madera tecnificada. “Creo que son formas de trabajar la madera perfectamente complementarias. Ni una ni otra es una solución para todo. Obviamente se puede usar la madera aserrada o tecnificada para todo, pero es un trabajo de conocimiento y prescripción el saber qué material y qué sistema es el idóneo para cada situación, ya sea a nivel estructural o un sistema de fachada industrializada o elementos decorativos dentro de la vivienda. Como todo, siendo aptos e idóneos cada uno de los sistemas para alguna situación en particular deberán coexistir e incluso utilizarse conjuntamente en proyectos”, asegura Elena Espuela.
Actualmente, España es uno de los países de Europa con mayor crecimiento en capacidad instalada en fabricación de sistemas industrializados. Tenemos actualmente empresas de fabricación de sistemas 3D, 2D o componentes repartidos a lo largo de todo el país que cubren la mayoría de los sistemas industrializados para la construcción realizados en diferentes materiales. El porcentaje de vivienda industrializada respecto al total crece cada año. Ahora mismo supone una proporción baja, pero sigue la estela de países más asentados como Reino Unido o Alemania.
En España contamos con un conjunto de condiciones propicias que auguran un crecimiento exponencial de la oferta en materia de industrialización y comenzamos a ver cómo constructoras y promotoras de primer nivel apuestan por ella, así como fabricantes con divisiones especializadas que dan apoyo a las diferentes casas de sistemas industrializados.
También desde el Gobierno se apuesta por la sostenibilidad y la circularidad; y otros agentes como estudios de arquitectura que defienden la industrialización desde fases tempranas de proyecto; los comentados problemas de falta de mano de obra y aumento de precios; exigencia de plazos de cumplimiento y normativa ambiental no hacen sino apoyar las expectativas de crecimiento de la construcción industrializada en España.
Respecto a la normativa en madera, ¿Qué áreas de mejora debería abordar la administración? “Existen disonancias entre la normativa europea de Eurocódigo y la nacional y deberían unificarse criterios o referirse completamente a la normativa a nivel europeo adoptada por la mayoría de países. De la misma forma, a nivel nacional y europeo debería realizarse una revisión de los materiales y abordar las nuevas tecnologías que actualmente se emplean como soluciones de madera tecnificada como el CLT. Debería incluirse regulación de estructuras mixtas de madera con madera y otros materiales. Por último, debería realizarse una revisión en la normativa y ampliación de información disponible regulatoria en materia de uniones tradicionales”, explica Elena Espuela.
Ventajas de la madera
Una de las mayores ventajas de la madera es que es un aislante completamente natural, ya que su estructura es altamente porosa y tiene la característica de almacenar numerosas áreas de calor, lo que permite que se construyan estructuras de un menor espesor y un consumo energético bajo.
Hay una gran cantidad de especies de madera, todas varias tanto en su aspecto como en su calidad, así que es material adaptable a diferentes presupuestos y gustos estéticos. Este es un material que cuenta con una relación resistencia-peso que es mucho más favorable que el acero, y mucho más favorable que el hormigón.
En la construcción de obras de madera no se necesita esperar los tiempos de secado ya que hay una técnica llamada “en seco” con la que es posible ahorrar tiempo en la construcción y también reducir el presupuesto.
Si la madera recibe un tratamiento adecuado para su cuidado, inmunizándose en contra de la humedad y los insectos, entonces se convierte en un material de una larga vida útil. También es un material de construcción que se puede adaptar en cualquier lugar sin importar el clima y las condiciones ambientales que se tengan.
Aunque la madera es un material inflamable, la madera laminada cuenta con una resistencia al fuego excelente ya que esta se carboniza superficialmente de manera uniforme, debido a que no tiene hendiduras, así que crea una barrera de protección que no permite que las llamas sigan su camino.
La madera cuenta con un ciclo de vida que facilita el camino hacia la reducción total de la huella de carbono y el cumplimiento del Pacto Verde Europeo, que marca el cese de las emisiones para el 2050. La construcción en madera hoy en día es el resultado de la adecuación a las nuevas necesidades de sostenibilidad, coste y mantenimiento futuro. Pero el reto se multiplica por el doble cuando queremos introducir este material renovable dentro de los procesos de industrialización en altura.