El Ministerio de Vivienda lanzó su plan nacional para la construcción de vivienda social en madera con 10 líneas de acción; buscan promover la industria forestal y el desarrollo de la construcción de madera
Fuente: El Observador
El Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial (MVOT) lanzó su plan nacional para la construcción de vivienda social en madera con 10 líneas de acción que buscan promover la industria forestal y el desarrollo de la construcción de madera en un plazo de cuatro años.
La actividad, que se desarrolló en el Salón de Eventos Especiales del Palacio Legislativo, contó con la presencia de la ministra de Vivienda y Ordenamiento Territorial, Irene Moreira y el subsecretario Tabaré Hackenbruch. También estuvieron Matías Bendersky, representante del Banco Interamericano de Desarrollo(BID) en Uruguay, que apoya la iniciativa, y Juan José Ugarte, consultor del BID.
Moreira dijo en rueda de prensa que esta hoja de ruta es el resultado del trabajo de más de 78 grupos que estuvieron estudiando “cuáles eran las limitaciones y las barreras que habían para la construcción en madera”. En ese sentido, indicó que “hay un desconocimiento bastante grande en ciertos temas” relacionados a la madera como pueden ser “el mantenimiento de la casa o el fuego”, que generan “miedo” pero que ello “no es así”.
La jerarca destacó el apoyo al proyecto por parte de Chile, Finlandia, Italia y Japón y afirmó que la construcción en madera es una “política de Estado” que trascenderá su administración ya que “así lo están haciendo en los distintos puntos del mundo”. Entre los invitados al evento estuvo el embajador de Japón en Uruguay, Asari Hideki.
Moreira explicó que hay “mucho interés” del sector privado en el proyecto. Si bien no específico cifras, enfatizó que la construcción en madera tiene “un costo menor” que la construcción tradicional y remarcó que, además se hacen “en muy corto tiempo”.
“En el plan piloto que se hizo en Rivera, en cuatro meses ya estaban los participantes entrando en su casa. Yo creo que esto es fundamental en un momento donde hay tanta falta de vivienda. Poder ahorrar en el tiempo de construcción y sin perder la calidad me parece que es bien importante y vale más que plata”, destacó.
Los diez ejes de la hoja de ruta La Hoja de Ruta (HDR) para la Construcción de Vivienda Social en Madera en Uruguay tendrá un eje transversal que es la generación de una estructura de gobernanza con múltiples actores, que se incorporarán a otras iniciativas que ya están en desarrollo. En un plazo de seis meses se prevé la constitución de grupos técnicos, la presentación de planes de trabajo y la definición de indicadores. En dos años, se realizará la primera publicación de resultados y en cuatro años se publicará la evaluación de la HDR.
Además de ese eje transversal, se trabajará en 10 líneas de acción. La primera apunta a generar o actualizar normativas nacionales o departamentales para la construcción en madera (decreto nacional fuego, ley de propiedad horizontal, durabilidad de maderas, entre otras). La segunda línea de acción refiere al desarrollo y ejecución de diversos proyectos en madera como viviendas en altura y extensión y edificios públicos para activar de forma consistente la demanda de madera.
En tercer lugar apuntará a completar los trabajos de caracterización de la madera nacional con el objetivo de respaldar la actualización normativa y certificar sus estándares de producción. El cuarto punto busca generar e implementar programas colaborativos de formación de capacidades multinivel, tanto en el ámbito público como en el privado. La quinta acción va por el lado de desarrollar soluciones constructivas adecuadas a la madera nacional y los estándares de desempeño exigibles (estructura, fuego, acústico, térmico). En sexto lugar se va por el lado del desarrollo de un programa de inversiones y apoyo para la mejor de competitividad y productividad de las pymes madereras, incluyendo actividades de capacitación y asociatividad.
La séptima línea de acción pone énfasis en concebir e implementar una estrategia de comunicación efectiva hacia los distintos públicos como puede ser usuarios, desarrolladores, profesionales y público en general. El octavo punto busca generar incentivos (exoneraciones, aportes, costos financieros o de seguros) hacia desarrolladores privados para que opten por la construcción en madera. En noveno lugar se encuentra la idea de fomentar el comercio nacional de la producción forestal, apuntando a una oferta constante y de calidad hacia pymes madereras de aserrío y producción de componentes. El último punto implica la generación de guías de diseño, especificaciones, construcción, recepción de obras y uso de edificaciones de madera para los públicos objetivos.
Piloto con números positivos
En un plan piloto desarrollado por iniciativa de Mevir en Rivera,se construyeron 10 viviendas bajo el modelo framing, con madera casi en 100%, que dio un resultado positivo. Según había informado el viceministro Hackenbruch a El Observador , con la realización de ese plan piloto se constató que “el metraje de construcción resultó 50% más rápido, 40% más barato (unos US$ 700 por metro cuadrado) y no bajó la calidad de la vivienda decorosa” frente a la edificación de una vivienda con materiales tradicionales.