La construcción ligará en 2023 su tercer año consecutivo de crecimiento y a pesar de ello, se mantendrá como uno de los sectores más rezagados del país.

Fuente: Real Estate

Las grandes obras de infraestructura sexenal no han sido suficientes para impulsar al sector productivo que se mantiene con un gran rezago. Analistas afirman que a pesar del buen desempeño de la obra civil, no alcanza para impulsar a la industria de la construcción.

Desde BBVA Research afirmaron que la construcción se detuvo al cierre de 2022, con un avance de 0.4%, por lo que su recuperación se mantiene lejana pese a la mejora de la obra civil que suma su segundo año consecutivo de crecimiento.

Cómo le irá a la industria de la construcción este año

En su informe ‘Situación Inmobiliaria’, correspondiente al primer semestre de 2023, los analistas afirmaron que “en 2023 se estima un crecimiento del 2.2% de este sector gracias al aumento de más del 20% en términos reales de los recursos dirigidos a obra pública indicados en el presupuesto de la federación, así como por una menor presión inflacionaria de los insumos para la construcción, cuya apreciación ya bajó del 10 por ciento”.

Indicaron que “el fuerte avance del 4.0% del PIB de Obra Civil no compensa la caída del 2.4% del PIB de la Edificación (en 2022), tal que el sector de la construcción acelere el paso hacia una recuperación, entendida como el nivel del PIB del 2018”.

Agregaron que el bueno desempeño de la obra civil se espera también en 2023, con el mismo fundamento del año previo, por la elevada inversión de recursos públicos destinados a la obra pública, principalmente de infraestructura energética.

Pero en contraste, afirma el informe que “en la edificación no se espera un cambio de tendencia al no dinamizarse la demanda por vivienda nueva, en particular del segmento de interés social. La oportunidad para este subsector podría llegar por la edificación productiva, principalmente en naves industriales y Centros de distribución conforme se concreten las inversiones industriales, por ejemplo, por el proceso de nearshoring”.

De cumplirse la proyección de crecimiento planteada para 2023, en los cinco primeros años de la presente administración federal la industria de la construcción tendría una tasa de crecimiento promedio negativa de –2.36 por ciento.

Lo anterior se explica porque en 2019 presentó una contracción de -5.2%; en 2020, el año de arranque de la pandemia se observó una contracción de -17.2%; para 2021 y 2022 se observaron repuntes de 8.0 y 0.4%, respectivamente; finalmente, se prevé en avance de 2.2% en el 2023.

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