Aunque la madera ofrece beneficios tanto económicos como medioambientales, en México no ha despegado por la falta de capacitación sobre su uso.
Fuente: Obras Expansión
En la industria de la construcción, las alternativas para crear procesos, productos y materiales sustentables cada vez va en aumento. No solo las grandes compañías cementeras se han comprometido a bajar sus emisiones de carbono en 2030, también los arquitectos se han sumado empleando un material que es renovable y no daña al medio ambiente: la madera.
En los últimos meses, cada vez es más común escuchar construcciones conformadas por madera, por ejemplo, el más reciente, es el edificio Gaia, que es la Escuela de Negocios de la Universidad Tecnológica de Nanyang, y es el más grande de Asia.
México también resguarda un edificio construido con este material, conocido como Jardín Anatole, ubicado en Polanco, creado por el estudio Dellekamp Arquitectos.
La madera se destaca como un material ideal para la construcciones, debido a sus múltiples beneficios. De acuerdo con el arquitecto Manuel Elorza Wershoffen, que forma parte del Consejo Nacional de Madera (Comaco), los bosques son acumuladores de carbono.
Cada árbol absorbe cerca de una tonelada de bióxido de carbono y produce aproximadamente 3/4 de tonelada de oxígeno por cada metro cuadrado de crecimiento. Mientras que en las construcciones se destaca por su ligereza, trabajabilidad, funciona como aislante térmico y acústico, como sistema de bajo costo.
De acuerdo con el experto construir una vivienda con madera representa 15% menos en el precio que una propiedad convencional. Mientras que construir un conjunto de 10 unidades implica 30% menos del costo de una vivienda con materiales convencionales, y finalmente construir una vivienda social representa 40% menos del costo que una vivienda con materiales convencionales.
Para el caso del ahorro de energía, Elorza comenta que producir una tonelada de concreto requiere del consumo de 8.5 millones de BTU por sus siglas en inglés (unidad del calor), para producir una tonelada de viga de acero representa unos 50 millones de BTU. Mientras que producir una tonelada de madera aserrada representa un consumo de 2.9 millones de BTU.
Sin embargo, pese a sus beneficios medioambientales, esta alternativa no ha despegado en el país, de acuerdo con Derek Dellekamp, CEO de Dellekamp Arquitectos, uno de los principales retos es conseguir madera certificada, ya que no hay variedad. En el caso de Jardín Anatole se utilizó madera laminada.
Elorza Wershoffen menciona que no es exista variedad, lo que hace falta es capacitación, así como la falta de disponibilidad de contar con una oferta de madera secada y clasificada para uso estructural
Agrega que el tipo de madera ideal para realizar construcciones en México, es la de pino, debido a su abundancia, agrega que para iniciar en las construcciones de madera se debe emplear la materia prima nativa, es decir optar por maderas que se den en el sitio.
De acuerdo con el Sistema de Precios de Productos Forestales Maderables (Sipre), el pino es la especie más comercializada con 72% de presencia en el país, seguida del encino 13% y el oyamel 12.9%.
El precio del pino varía dependiendo de la zona que proviene, de acuerdo con Sipre se clasifican en tres regiones: norte, sur y centro, y el precio de este se considera si es comprada en aserradero que es donde pasan los troncos del pino a tablas.