En una entrevista exclusiva, el director ejecutivo de este nuevo centro de excelencia del ACI, Phil Diekemper, comentó sobre las diversas estrategias que se abordarán desde esta iniciativa para lograr incrementar el índice de la productividad en la construcción, el que sufre de un estancamiento a escala global desde hace varios años.

Fuente: Hormigón al Día

Para los distintos actores que conforman el ecosistema de la industria de la construcción -incluyendo a los vinculados al mundo del hormigón- no es un misterio que la productividad en el sector vive un momento complejo. A nivel local, según un informe de la Comisión Nacional de Productividad, la productividad en el sector cayó un 0,7% el año 2020, reflejando un lento avance en la materia, en comparación con otras industrias.

Lo que ocurre en Chile, sin embargo, es reflejo del acontecer mundial en la materia. “El instituto McKinsey estudió este fenómeno hace algunos años y observó la productividad en una variedad de industrias alrededor del mundo y, en general, hallaron que en la construcción, en particular, la productividad avanzó muy lentamente en comparación con otros sectores”, explica Phil Diekemper, ingeniero civil estructural de la Universidad de Illinois y desde comienzos de 2023, director ejecutivo de PRO, el nuevo centro de excelencia del American Concrete Institute (ACI) enfocado justamente en la productividad de la industria de la construcción con hormigón.

Con una vasta carrera como contratista, el ingeniero estructural fue “sacado del retiro”, como menciona, por el ACI para liderar este nuevo centro de excelencia de la entidad, que busca dar con soluciones para mejorar e incrementar este sensible factor. “Creo que este tema se volvió relevante para el ACI, y es una pasión que yo comparto, lo que llamó a liderar este esfuerzo de crear un ambiente colaborativo para buscar y desarrollar soluciones y, esencialmente, ayudarnos mejorar a mejorar nuestra industria”, destaca.

En ese sentido, el director ejecutivo de PRO comentó que, de no perseverar en el desarrollo de estrategias que vayan en ese sentido, “creemos que otras industrias podrían tomar ventaja de esta oportunidad y el hormigón tiene el potencial para incrementar los niveles actuales que presenta nuestro sector”.

Productividad: ¿Qué hacer, bajo la mirada de PRO?

Desde que el ACI dio a conocer el nacimiento de este nuevo centro de excelencia, se generaron muchas interrogantes respecto a cómo la entidad abordaría una temática que va más allá de lo netamente técnico o de códigos constructivos, abordados desde la mirada de la academia. “Para crédito del ACI -comenta Phil Diekemper- sus ojos y oídos estuvieron abiertos a lo que muchos en la industria ya habían mencionado, que la productividad es un tema, que existen obstáculos y que existen frustraciones entre los contratistas”.

¿Qué análisis tiene usted sobre la ralentización de la productividad en el sector de la construcción?
-Algunos dirán que existe una desconexión entre el diseño y la construcción y que no estamos diseñando estructuras de hormigón que sean construibles, que aprovechen las ventajas de los sistemas, que impulsen las tecnologías que puedan hacerlo y que estén disponibles. Los programas de diseño tienden a optimizar el material, pero no el trabajo. No necesariamente optimizan tiempo.

En ese sentido, ¿Cuál cree usted que sería una de las respuestas para avanzar en materia de productividad?
-Para avanzar en productividad, el trabajo colaborativo entre el diseñador y el contratista de hormigón es necesario, porque el contratista comprende el tema de los costos, de los tiempos, comprende los sistemas, los materiales, los equipos, los materiales que se encuentran disponibles y sabe cómo impulsarlos. Los contratistas pueden traer una importante cantidad de valor a la mesa del diseño en una etapa temprana y a menudo, a los contratistas no se les suele brindar esa oportunidad y no son valorados en la mesa de diseño y por este motivo, muchos proyectos se diseñan sin tomar las ventajas que ofrecen estas oportunidades para mejorar la velocidad o la eficiencia del trabajo, ambas variables que, considero, mejorarían la productividad.

En la foto, Phil Diekemper, director ejecutivo de PRO, centro de excelencia del ACI para impulsar la productividad de la industria de la construcción con hormigón.

Avanzar en ese camino, a juicio del director ejecutivo de PRO, es sólo uno de los distintos caminos a transitar para desarrollar una estrategia que permita incrementar este índice. “Existen tantas variables que pueden afectar los resultados del contratista que podrían adoptarse en la etapa de diseño, que nosotros necesitamos que se realice, para llevar a la productividad al siguiente nivel”, subraya.

A partir de este diagnóstico, ¿PRO generará contenido como códigos de la misma manera en que lo realiza el ACI, para “normar” este aspecto de la construcción?
-Primero, tienes que entender que PRO es un centro de excelencia que es subsidiario del ACI y PRO tendrá su propia junta de directores, tendrá su propia membresía, tendrá su propia visión y misión. Eso, en relación con su independencia. Por otro lado, ACI le dará a PRO la libertad de perseguir las avenidas que crea tener mayor impacto para alcanzar sus objetivos y puede que estas evolucionen con el tiempo e involucren algo diferente a los esfuerzos iniciales, pero es un esfuerzo que está en permanente movimiento, que está “vivo”, no se enfoca necesariamente en códigos. Modificar códigos puede que sea una solución, quizás un proceso, una recomendación que PRO pueda tener para mejorar la productividad, pero no es necesariamente su misión cambiar códigos.

En ese aspecto, Phil Diekemper subraya que “existen muchas avenidas que pueden seguirse y quienes sean los integrantes de PRO, liderarán las direcciones de los esfuerzos que actualmente se están haciendo”.

Estrategia colaborativa: El gran esfuerzo para incrementar la productividad

Dentro del análisis que realiza el director ejecutivo de PRO, existe un factor que, a su juicio, incide directamente en los actuales índices de productividad del sector. Se trata de la integración de los distintos actores involucrados en un proyecto, especialmente de los contratistas ya que estos, en su opinión, “comprenden el tema de los costos, de los tiempos, comprenden los sistemas, los materiales, los equipos, los materiales que se encuentran disponibles y sabe cómo impulsarlos”.

En ese sentido, como antiguo contratista, Phil Diekemper posee un acabado conocimiento de esas temáticas. “A menudo, como contratista, me enfocaba en la logística de un proyecto: la presentación, la recepción, el movimiento de materiales, la secuencia del vertido del hormigón, uso de un equipo en particular y ninguno de esos pasos se consideraba dentro de la etapa de diseño”.

“En el mundo actual -agrega- más y más proyectos se construyen dentro del radio urbano, donde la presentación y la secuencia de los materiales son limitadas y quizás existan restricciones relacionadas con las horas para realizar los trabajos o riesgos asociados a estructuras colindantes o a personas, el tráfico, entre otras. Existen tantas variables que pueden afectar los resultados del contratista que podrían adoptarse en la etapa de diseño, para llevar a la productividad al siguiente nivel”.

¿Usted ve que una estrategia de trabajo más colaborativo entre los distintos actores involucrados en un proyecto podría incrementar la productividad en el sector?
-Exactamente. Nuestra industria está muy fragmentada. Tienes al especialista en armadura, al del hormigón premezclado, al de diseño, al especialista en trabajo, al que recibe a las grúas, tienes los intereses del mandante, que son distintos a los del contratista. El problema es que está todo tan fragmentado, que se genera ineficiencia.

“Creo que es perjudicial enfocarse sólo en las frustraciones y problemas”, puntualiza. “Lo hago para ilustrar la oportunidad que representa PRO, lo que se puede hacer desde este centro y con suerte, como su director ejecutivo, puedo apreciar las perspectivas que todos sus integrantes puedan tener, porque estamos buscando mejorar a la industria”.

Por ejemplo, ¿cuál sería una manera de mejorar la productividad bajo esta estrategia de trabajo colaborativo?
-Este es un ejemplo sencillo: si el hormigón vertical, me refiero a columnas y muros, se diseñaran con un hormigón de 8000 PSI, y si las losas de pisos se diseñan con un hormigón de 4000 PSI, el código de diseño del ACI requiere que el contratista vierta una mezcla con mayor resistencia en la losa de piso, donde ésta descansa sobre las columnas y los muros, así es que cuando estás vertiendo tu losa, terminas utilizando no una, sino dos mezclas y a propósito, utilizar la mezcla con la mayor resistencia en esas ubicaciones. Es un proceso altamente improductivo del que los contratistas de hormigón a menudo se quejan, pero es necesario desde el punto de vista del diseño estructural.

“¿Cómo podemos añadir a la etapa de diseño para colaborar y así, hallar una vía para minimizar este proceso improductivo?”, se pregunta el director ejecutivo del PRO. “Este es un ejemplo -dice- de las áreas en las que, creemos, PRO puede tener un impacto y la clave es la colaboración entre el contratista de hormigón, el ingeniero diseñador y el mandante. Y cualquiera de esas partes puede tener un concepto que quieran perseguir, pero si lo hace en su propio silo, lo hará de una forma menos efectiva que si lo hiciera con una solución colaborativa”.

Cuando se explica de ese modo, ¿por qué es complejo lograr este trabajo colaborativo?
-Es tan difícil porque cada participante tiene sus propios intereses y esa es la razón del por qué. No es sólo un actor involucrado, no son sólo los ingenieros diseñadores, no son sólo los contratistas del hormigón, no son sólo los proveedores. Todos necesitamos resolver este problema, necesitamos trabajar sobre la base de un esfuerzo colaborativo.

“En cierta medida, la productividad es como un globo de agua: si el contratista lo aprieta no puede tener éxito porque tendrá un impacto en el ingeniero diseñador y el mandante. Si el ingeniero diseñador lo aprieta, él no puede tener éxito porque impactará en el contratista. Existen mejores soluciones para mejorar la productividad mediante el diseño y también, que exista un crecimiento para los contratistas”.

Es por ello que, a juicio del director ejecutivo de PRO, es necesario abordar la productividad desde un enfoque que considere tanto a los actores involucrados dentro de un proyecto como también, en identificar procesos. “Existen técnicas constructivas que, por ejemplo, puede que no se utilicen en Perú o Miami, pero quizás sí se usen en Kansas City o Nueva York y quizás esas pueden ser avenidas potencias en la respuesta para incrementar la productividad: identificar los procesos que podamos emular”, subraya.

¿Hacer de esos procesos una suerte de estándar, cree usted?
-Sí. Existen tantas oportunidades para hacer un impacto en la productividad y eso es lo que intento expresar. Y no estoy diciendo que nadie lo está tratando, pero cuando hoy tienes un proyecto cuya fecha de entrega es dentro de un año, todo tu foco está en que se debe ejecutar. Algunas veces, hay que tomar distancia y decir “ok, si vamos a construir este proyecto a cinco años desde hoy, ¿qué podemos hacer para que su construcción sea más eficiente, más productiva?”, así es que PRO nos da una oportunidad de tomar ese paso atrás, porque mucho de lo que hacemos para que tenga un impacto en la productividad no es algo que se pueda resolver por cuenta propia en un corto periodo de tiempo.

En ese sentido, el experto comenta que “como contratistas, a menudo vemos especificaciones que están desactualizadas, que no reflejan las tecnologías actuales. El hormigón, quizás especificado por prescripción en vez de desempeño, sería un ejemplo para empoderar a los proveedores del premezclado y también a los contratistas, para crear diseños de mezcla que les permitan ser más eficientes versus un diseño prescriptivo que las especificaciones puedan requerir”.

Así, es en la búsqueda de los distintos caminos -siempre desde la óptica del trabajo colaborativo- donde PRO tendrá su campo de acción. “Como director ejecutivo del centro, puedo apreciar las perspectivas que todos los integrantes puedan tener: sus carreras, sus roles dentro de la industria, porque estamos buscando mejorar a la industria, no estamos buscando tomar partido por uno u otro bando”, dice Phil Diekemper.

“Ahora, si el enfoque es anticuado e ineficiente -agrega- entonces sí, buscaremos cambiar eso, ya sea en el ámbito del diseñador, del constructor, de los códigos, cualquier cosa que sea anticuada debiese ser un objetivo para mejorar, para que continuemos apalancando enfoques técnicos modernos, equipos, procesos de programación, enfoques en el diseño, pero muchos de esos avances están restringidos en su impacto porque existen otros factores que limitan su éxito”.

Tecnologías futuras y los nuevos pasos de PRO

Pese a los índices de productividad estancados del sector, la industria ve con buenos ojos el desarrollo de nuevas aplicaciones y metodologías constructivas que podrían incrementar estas cifras. Tecnologías como la impresión 3D, por ejemplo, son bien recibidas por los distintos actores como una respuesta para ganar eficiencia en los procesos y acelerar la construcción de proyectos.

Sobre este aspecto, Phil Diekemper se muestra cauto. “PRO es agnóstico a cualquier sistema, estrategia o concepto”, dice. Siguiendo esa línea, el director ejecutivo del centro comentó que una de las posibles estrategias a seguir es “evaluar una variedad de métodos de construcción y diseño con hormigón, porque a menudo, la variedad de enfoques que existen puedan incidir en la eficiencia, velocidad o productividad de la mano de obra, y quizás el rol de PRO sea validarlos y promoverlos”.

“Por ahora -añade- no quiero impedir que la junta directiva de PRO vea y analice lo que crea que pueda ser mejor. No obstante, estamos agnósticos en cuanto a materiales, procesos constructivos y conceptos de diseño”.

Pero, a su juicio, ¿cree que esta nueva tecnología, la impresión 3D, juegue un rol protagónico en lo que respecta a la productividad en la construcción?
-Creo que, si bien la impresión 3D es una estrategia intrigante, creo que para el futuro próximo, probablemente tenga una aplicación más bien limitada en nuestra industria. Mi sensación es que los esfuerzos de PRO probablemente estarán mejor puestos en técnicas o ideas o estrategias o conceptos que tengan un rango de impacto mucho mayor.

En ese sentido, el director ejecutivo de PRO cree que si tanto el contratista como el ingeniero diseñador consideran que este tipo de tecnologías resultan beneficiosas para los proyectos, el centro debiese promoverlas para fomentar el trabajo colaborativo.

Otro de los temas que están en la palestra es el de la sostenibilidad. ¿Cómo dialogarán las directrices de PRO con esta importante temática?
-Creo que la productividad tiene que adoptar la sostenibilidad. Creo que tiene que adoptar el concepto de resiliencia. No es exclusivo de eso, no es a expensas de la sostenibilidad, pero cada una de esas variables hacen que la productividad sea un desafío mayor y en cualquier momento que nuestra industria agregue criterios adicionales al resultado de una estructura de hormigón, cada vez que eso se hace, se transforma en un desafío para la productividad.

Desde su anuncio, en la edición 2023 de la feria World of Concrete, el Centro de Excelencia PRO se dedicó a “compartir nuestra misión y visión, y en atraer a integrantes que crean fehacientemente que se deben hacer los cambios, así es que nuestros primeros esfuerzos se concentraron en educar a la industria, a la comunidad de diseño, a los proveedores de materiales, a los contratistas, que PRO es una avenida de cambio y en entusiasmarlos con nuestra existencia”, explica Phil Diekemper.

Ese primer trabajo ya está dando los frutos para el centro. Primero, en la conformación de su primera junta de directores y, al mismo tiempo, en la realización de “PRO: Advancing Productivity Day”, evento organizado por el centro de excelencia que se realizará el 31 de octubre y en el que se reunirán los distintos actores de la industria para conversar sobre productividad y el rol que jugará PRO para impulsarla.

“El mundo está esperando a que PRO fije un curso de acción”, dice Phil Diekemper. “Todos nos beneficiaremos de ellos, pero aquellos que den un paso adelante e integren el centro y contribuyan con este esfuerzo, sin ninguna duda se darán cuenta, primero, de los beneficios y tendrán la oportunidad de liderar la dirección, de dirigir el producto del trabajo, de influenciar el producto del trabajo”, destaca.

Conozcan más detalles de PRO, el centro de excelencia del ACI para la productividad, en el siguiente video

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