Como ya muchos saben, California está lleno de startups innovadoras, especialmente las enfocadas hacia la tecnología aeroespacial. De hecho, la impresión 3D está siendo uno de los puntos clave en el desarrollo de nuevas tecnologías.
Fuente: 3D Natives
Un ejemplo de esto es el Terran 1 de Relativity Space, un cohete impreso en 3D que trataron de enviar este pasado mes de marzo al espacio sin éxito. A la vista de las infinitas posibilidades que tiene la impresión 3D en la carrera espacial, una startup llamada Orbital Composites decidió no quedarse atrás. Utilizando materiales novedosos y técnicas innovadoras en la impresión 3D enfocada al desarrollo aeroespacial, ha conseguido firmar contratos con la Fuerza Espacial de Estados Unidos, una división del ejército estadounidense dirigida a investigar el espacio.
El fundador de la compañía, Cole Nielsen, habla sobre la inspiración que obtuvo en las construcciones espaciales futuristas de películas y la visión generalizada que todos tenemos. De ahí le surgió la siguiente idea: “Sin embargo, el principal problema es el poco espacio con el contamos dentro de los cohetes: no podemos meter un puente en una nave, pero sí que podremos construirlo en el espacio”. De manera que decidió tratar de llevar una impresora 3D al espacio para poder llevar menos carga en los cohetes y construir todo lo necesario en el propio una vez en órbita.
La Fuerza Espacial de Estados Unidos, ha firmado dos contratos con Orbital Composites, con los cuales pretende solucionar dos de los más importantes problemas a los que se enfrentan en el espacio. Un contrato promete la construcción de las ya mencionadas antenas, el otro, en colaboración con la NASA y Cosmic Shielding, trata sobre crear mediante la impresión 3D escudos contra la radiación solar. De esta manera serían capaces de proteger tanto las naves como sus elementos electrónicos de los efectos del Sol y el desgaste que éste les produce. Orbital Composites, honrados de que la Fuerza Espacial haya creído en ellos, espera poder tener una flota de pequeños satélites en los próximos años, que proporcionen cobertura para todo tipo de aplicaciones.