Se trata del primer levantamiento de este tipo que se realiza en Chile.
Fuente: CChC
Uno de los principales desafíos que enfrenta la construcción tanto en Chile como en el mundo, es poder avanzar en la sostenibilidad. Para eso, se recomienda el uso de estrategias de innovación que permitan hacer más eficiente y competitiva a esta actividad.
Con el objetivo de tener datos certeros respecto de esta materia, la Cámara Chilena de la Construcción, CChC, encargó al Dictuc de la Universidad Católica la “Radiografía de Innovación para la Construcción”.
La particularidad de este estudio es que ofrece una radiografía del panorama actual de la innovación en el sector observando no solo el desempeño de las empresas en esta materia, sino también la oferta y utilización del ecosistema de innovación que está disponible para ellas en el país.
El estudio fue presentado este martes 9 de enero en el marco del encuentro “Tenemos que Innovar” que contó con la presencia de la Ministra de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, Aisén Etcheverry, quien destacó la necesidad de elevar la productividad en el sector.
“La industria está trabajando en mejorar la productividad porque ésta significa mayor crecimiento de la economía y el gobierno está haciendo lo propio de maneras muy concretas. Una de ellas es identificar aquellas tuercas que hay que apretar para que los procesos, las metodologías y estrategias de innovación que tiene el sector privado, particularmente industrias tan relevantes como ésta, puedan llegar a buen puerto y tengan oído de parte del gobierno. Esa tarea es una que desde el Ministerio de Ciencia estamos abordando con mucho énfasis y sin duda esta radiografía nos va a permitir identificar nuevas medidas que podemos abordar e implementar que contribuyan en esta colaboración público-privada que es esencial, para que la productividad de nuestra industria y el crecimiento de nuestro país despegue”.
Por su parte, la gerenta general de la CChC Paula Urenda, quien presentó la radiografía argumentó que “Tenemos de alguna manera en el inconsciente colectivo que la industria de la construcción no ha sido capaz de modernizarse y de innovar en los últimos años. Hoy vemos que eso no es así, se derriba de alguna manera el mito de que la construcción no innova. Y eso quisimos hacer en esta Radiografía, quisimos medir cómo está el sector de la construcción en materia de innovación y también cómo estamos participando en el ecosistema, obtuvimos conclusiones que son muy valiosas para toda la industria”.
La Radiografía de Innovación de Construcción, constata que, aunque esta industria sigue registrando bajos niveles de innovación, ha dado cuenta de importantes avances en la incorporación de nuevas tecnologías constructivas, como el caso de la BIM y la impresión 3D, por mencionar algunas.
El estudio revela que las empresas de la construcción, aún cuando mantengan su cultura tradicional, están comenzando a adoptar nuevas formas de hacer las cosas al desarrollar proyectos, tal como lo muestra la Encuesta Nacional de Innovación, ENI. La encuesta señala que en el período 2019-2020 la construcción mejoró su desempeño en comparación con el período 2017-2018 en los cuatro aspectos evaluados por la encuesta: Investigación y Desarrollo, Innovación de Productos, Innovación de Procesos e Innovación Agregada.
Se agrega que es particularmente significativo el avance en Innovación de Procesos, que incluye las asociadas a métodos de producción o prestaciones de servicio, logística, procesamiento de información, comunicaciones, contabilidad, organización de procesos y responsabilidades, toma de decisiones, relaciones externas, gestión de recursos humanos, marketing, entre otras.
En la encuesta correspondiente al período 2017-2018, el 9,3% de las empresas del sector señaló haber realizado este tipo de innovación, porcentaje que aumentó más de cinco puntos porcentuales en la siguiente medición, llegando a 14,4%.
La información entregada por esta Radiografía permite identificar oportunidades para mejorar los niveles del sector, entre ellos, desarrollar métodos que les permitan a las empresas del sector registrar y medir las innovaciones que se producen en el ejercicio diario de sus actividades; usar las herramientas y los fondos públicos disponibles para que las empresas innoven, como, por ejemplo, las iniciativas de CORFO y aprovechar la disponibilidad de consultoría de innovación para que las empresas del sector cuenten con estudios que les permitan instalar y desarrollar capacidades avanzadas de innovación.